Las quinielas son patrimonio del Estado

La reclamación de mayores beneficios de los ingresos de las quinielas por parte de los clubs de fútbol -pretensión que, según algunos rumores, alimenta el presidente barcelonista José Luis Núñez-, parece una guerra difícil. La mayoría de los especialistas consultados por EL PAIS coinciden en señalar que los clubs no poseen ningún derecho sobre los beneficios de estas apuestas, que son consideradas como un sistema de recaudación del Estado.Según la teoría, que podríamos definir como reivindicativa, el Estado se estaría lucrando con la explotación de la popularidad de los clubs de fútbol. En las quinielas se especula con los resultados de los encuentros entre los equipos de fútbol, a los que no revierten los beneficios. De los ingresos de las quinielas, el 55% se destina a premios; un 12% se lo queda el Patronato para sus gastos de organización -un sobrante de esta cantidad se entrega a la Mutualidad de Futbolistas-; un 11 % se reparte entre las diputaciones provinciales para que lo utilicen según su deseo, y un 22% va a parar al Consejo Superior de Deportes y constituye prácticamente la única fuente de financiación del deporte español. El Consejo de Deportes reparte esta cantidad entre las federaciones deportivas. A la de fútbol va a parar un 13 % de esa cantidad, es decir, un 2,86% del total de los ingresos, o, si se prefiere, el 6,35% del total de las ganancias. Para algunas personas ligadas al fútbol, éste es un porcentaje demasiado pequeño en el reparto de los colosales beneficios que dejan las quinielas. Hay que pensar, además, que ese 6,35% no revierte a los clubs cuyos nombres aparecen en los boletos sino en una pequeñísima parte, pues en su mayoría está destinado a sufragar los gastos de la Federación en todos los órdenes y en todas las categorías.

Una antigua ambición

Hace tiempo que la gente del fútbol ha iniciado estudios para intentar reclamar mayores beneficios para los clubs. Antonio Calderón, gerente del Madrid hasta hace poco, explicó a EL PAIS: «Durante algún tiempo, hace ya unos quince años, el Madrid realizó consultas para saber si es posible o no. Creo que no es una cuestión clara, es decir, que no se puede decir tajantemente que los clubs tengan o dejen de tener ese derecho. El Madrid abandonó esa lucha porque no encontraba apoyo, nadie quería dar la cara, y preferimos olvidarlo.»Hace menos tiempo, año y medio aproximadamente, los gerentes de los clubs de Primera mantuvieron una serie de reuniones para estudiar éste y otros problemas, a fin de buscar soluciones al ahogo económico que es general en los clubs españoles. La impresión final era que no había nada que hacer. Según explicó a EL PAIS uno de estos gerentes: «En el derecho español existe una laguna en torno a lo que conocemos como derechos inmateriales, y por ahí se podría haber tanteado algo, aunque pienso que sin muchas posibilidades de éxito. Pero las quinielas datan ya de hace más de treinta años, y aunque fueran reconocidos esos derechos inmateriales de los clubs, ya habrían prescrito. Acaso sólo podrían reclamarlos los clubs que han empezado a aparecer en los boletos recientemente en razón de que antes no habían estado ni en Primera ni en Segunda; caso Salamanca, por ejemplo. Pero los grandes clubs, Madrid, Barcelona, Athletic, Atlético, Valencia y demás ya habrían perdido esos derechos.»

El Patronato

El Patronato de Apuestas Mutuas Deportivas Benéficas es un departamento del Servicio Nacional de Loterías, dependiente del Ministerio de Hacienda. Presidente del consejo de administración del Patronato y jefe del Servicio Nacional de Loterías es Antonio Gómez Gutiérrez. En su opinión, no hay dudas al respecto: «Las quinielas son una forma de recaudación del Estado. Se escogen los resultados de fútbol como se podría escoger cualquier otra cosa. Se juega con esos resultados, pero igual se podría hacer con los de baloncesto o cualquier otro deporte, o hacer una simple lotería de números, el Loto, muy extendido en otros países. Aquí se pensó en el fútbol porque hay afición a él, pero la afición a las quinielas no es sólo afición al fútbol, no lo olvide; las quinielas tienen un peso específico propio. Y el juego, también. Digamos que las quinielas explotan esa doble afición del español. Si un club se negara a entrar en las quinielas no pasaría nada si se dejara su espacio en blanco, por ejemplo. Pero no habría necesidad de hacer eso. No creo que nunca se plantee, y si tal ocurriera habría que estudiar el asunto, pero pienso que tal vez se podría desoir sencillamente su protesta y seguirle incluyendo.»De la misma opinión es Fernando Vara de Rey, asesor jurídico de la Federación Española de Fútbol: «El Estado especula con un evento, que son los resultados de fútbol. Unos resultados públicos, que no pertenecen a nadie. Lo sustantivo aquí no son los nombres de los clubs, ni siquiera la imagen de estas sociedades, sino sólo los resultados que se producen. No creo que ningún club intentara adoptar una postura de fuerza al respecto, pero igualmente pienso que si tal ocurriera la Federación no respaldaría esa actitud.»