Hiere a tres personas en Móstoles tras un intento de asalto
A primeras horas de la madrugada de ayer se presentaron voluntariamente en la comisarla de Ventas los hermanos Manuel y Vicente Alegre García, que se responsabilizaron de los disparos de rifle efectuados el domingo por la tarde en el centro de Móstoles, a consecuencia de los cuales resultaron heridas tres personas, una de ellas de extrema gravedad.
El suceso ocurrió hacia las seis, en la confluencia de las calles de América y Rejilla. Los autores de los disparos han manifestado que regresaban de caza cuando fueron asaltados por una banda juvenil que esgrimía varias navajas. Uno de los dos hermanos, Vicente Alegre, empuñó un rifle de caza M calibre veintidós, que llevaba en el coche con la correspondiente autorización, y después de echar pie a tierra efectuó hasta diez disparos contra los presuntos asaltantes. Acto seguido volvió a subir a su vehículo, un Citroën de color blanco, y se dio a la fuga.Diversas personas que se encontraban en las cercanías no han podido determinar las causas que dieron origen al incidente, aunque han manifestado que vieron a una persona disparar con un rifle contra un grupo de jóvenes.
Pasado el susto inicial, los transeúntes comprobaron que dos de los jóvenes se encontraban heridos, uno de ellos con un impacto en la cabeza y el otro con una herida de bala en la mano. Posteriormente se supo que en el tiroteo resultó también alcanzado levemente, al parecer por rebote de una bala, el súbdito iraní Nedjatollah Mahrnood Iradeghani. Los tres fueron atendidos en primera instancia en el ambulatorio de la Seguridad Social de Móstoles, de donde fue enviado a su domicilio el ciudadano iraní, en tanto que los dos jóvenes eran trasladados a la Clínica de La Concepción.
A Manuel Hernández García, de diecinueve años, se le apreció una herida muy grave en la cabeza, que obligó a extirparle el temporal afectado por el balazo. Ayer por la tarde se encontraba en estado de coma profundo, aunque se mantenían sus constantes vitales. El otro herido, Antonio Rodríguez López, de veinte años, ha evolucionado favorablemente.
Los dos heridos están conceptuados en medios policiales como delincuentes habituales que, al parecer, actúan dentro de una banda muy conocida en Móstoles.
