Un político controvertido

Tomás Alba, concejal de la coalición de Herri Batasuna por el Ayuntamiento donostiarra, ha sido en los últimos tiempos una de las figuras más controvertidas políticamente en Guipúzcoa. Nació hace 42 años, estaba casado y era miembro de la asociación de vecinos de Astigarraga, que le eligió en las pasadas elecciones municipales. Su profesión era la de agente comercial y era miembro de las gestoras pro amnistía y presidente segundo de la Federación Española de Balonmano.Cuando el Ayuntamiento de San Sebastián tuvo que adoptar una decisión sobre la propuesta de que los mundiales se celebrasen en esta capital, los miembros del PNV y Herri Batasuna fueron los que pusieron alguna dificultad, ya que no consideraban oportuno que la prueba deportiva se realizase en esta ciudad. Tomás Alba y Jon Alcorta, ambos miembros de HB, aseguraron que ellos creían que los mundiales podrían beneficiar a San Sebastián.

Ante estas declaraciones se reunió la comisión de control de Herri Batasuna de San Sebastián, y en un comunicado que hicieron público dieron a conocer la noticia de que ambos concejales habían sido cesados de sus puestos. La respuesta no se hizo esperar, y tanto Alcorta como Alba dijeron que ellos no se consideraban cesados porque en ningún momento habían pensado dimitir.

Tomás Alba celebró una asamblea en Astigarraga, barrio por el cual se había presentado a las elecciones municipales, donde recibió el apoyo de las personas que asistieron a la misma para que continuara en su labor como concejal en el Ayuntamiento de San Sebastián.

El comité de control nombró dos sustitutos, pero tanto Alba como Alcorta siguieron trabajando en sus respectivas comisiones en el Ayuntamiento. Además, la junta electoral provincial no aceptó ni los ceses ni los nombramientos, por considerar que no se habían ajustado a los procedimientos legales que este tipo de asuntos exigen.