CAMPSA reconsidera su postura de no negociar la reducción de jornada
A últimas horas de ayer continuaban reunidos representantes de las tripulaciones de CAMPSA y directivos de la compañía, tras revisar ésta su primitiva negativa de no negociar la reducción de jornada laboral, en un intento de llegar a un acuerdo que evite la huelga de la flota, cuyo inicio está previsto para las doce de la noche de hoy.Las negociaciones, que, tras el desacuerdo del viernes, debían, reanudarse el próximo martes, volvieron a entablarse a primeras horas de la mañana de ayer, con la presencia del presidente de la compañía, Enrique Sánchez de León, y el director de la misma, Pérez Cerdá, en base a una reconsideración de su postura por parte de CAMPSA. La negativa a revisar la jornada laboral de estos trabajadores, que había sido mantenida firmemente por la compañía a lo largo de las negociaciones Y constituía el principal punto de fricción en las negociaciones, fue retirada ayer por los directivos de CAMPSA, que se mostraron dispuestos a negociar la reducción sobre cómputo anual a cambio de la desconvocatoria de la huelga.
Fuentes del Sindicato Libre de la Marina Mercante (SLMM),que, junto con CCOO y UGT, representan a las tripulaciones en las negociaciones del convenio, insistieron en la necesidad de que el posible acuerdo al que se llegara con la dirección fuera ratificado por los trabajadores previamente a la desconvocatoria de la huelga. Por lo que el paro, aun llegándose a un acuerdo el sábado, sólo podría ser desconvocado hoy.
El comité de huelga, en una conferencia de prensa celebra(la ayer por la mañana, reiteró como principales reivindicaciones para el convenio una homologación de jornada laboral con el resto de las plantillas de CAMPSA y un aumento salarial del 16,5 %. Asimismo acusaron a la empresa de aplicar unilateralmente la legislación de huelga, ordenando el desembarco de las tripulaciones y designando unos comités de mantenimiento muy insuficientes para garantizar la seguridad durante el paro. CAMPSA, sin embargo, ha reiterado públicamente que las medidas de seguridad son suficientes.
La dirección de CAMPSA ha asegurado que los efectos de la huelga no se dejarán sentir en los suministros.
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