Patrick Baillie,
joven canadiense de diecisiete años, asegura haber batido un récord mundial más: recoger un huevo, tirado desde 352 metros de altura, sin que se rompa. El joven Baillie recogió el huevo, lanzado desde la torre Nacional, de Toronto (Canadá), en una red llena de espuma de afeitar y algodón. La marca anterior, según el Libro Guinness de los récord, corresponde a un huevo lanzado desde un helicóptero a 182 metros de altura.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.