La DC italiana estudia un posible veto a Craxi

Ayer, a las doce de la mañana, la secretaría del Partido Socialista italiano (PSI) distribuyó a las agencias de prensa una nota muy lacónica en la cual se afirma que su secretario general, Bettino Craxi, presidente del Consejo de Ministros encargado de formar Gobierno, había anulado para hoy todo el calendario de las consultas con los partidos políticos. Esta decisión podría tener como fin abrir un paréntesis hasta que la Democracia Cristiana -que es el partido de mayoría relativa en Italia- no dé una respuesta definitiva sobre su actitud ante la formación del primer Gobierno presidido por un socialista en la historia de la República.Los observadores afirman que si la respuesta del partido que dirige Benigno Zaccagnini, que está profundamente dividido, fuese negativa, hoy mismo Craxi se presentaría al presidente de la República, Sandro Pertini, para renunciar a formar Gobierno.

La dirección democristiana continuaba reunida a la hora de cerrar esta edición y aún no se habían filtrado noticias fiables sobre el debate en curso. Rumores de pasillos afirmaban que el grupo que apoya al actual secretario nacional, Zaccagnini, es partidario de oponerse a Craxí y que incluso uno de los mayores líderes del partido había llegado a afirmar que la base democristiana hubiese preferido, paradójicamente, a Enrico Berlinguer, secretario general del Partido Comunista (PCI), como presidente del Gobierno antes que a Craxi.

Pero dentro de la Democracia Cristiana existe la preocupación de que un «no» al secretario general socialista puede tener graves repercusiones no sólo en la formación de un Gobierno estable para el país, sino también en las relaciones futuras entre los dos partidos. Y por lo que se refiere a los socialistas, el malhumor es tan grande que ya se ha empezado a amenazar con pasar a la oposición si Craxi recibe el veto de la DC. En este sentido se habla en ciertos órganos de prensa cercanos al Partido Socialista incluso de la posible dimisión del presidente de la República, Sandro Pertini. Estos rumores se fundan en una afirmación deljefe del Estado, según la cual, antes de disolver de nuevo las Cámaras, preferiría dimitir.

Presuntos terroristas expulsados del PSI

Otro hecho que acaba de suceder en Bolonia está creando en estos momentos nuevas dificultades al PSI. Se trata de tres sindicalistas inscritos en el Partido Socialista que fueron heridos con la explosión de una bomba a la puerta de un hotel de la estación termal de Abano.La policía les acusa de haber sido ellos los autores del fallido atentado contra el hotel, ya que en sus casas han encontrado material para construir bombas como la que estalló y material importante que puede revelar actividades terroristas en Italia y en el extranjero de los sindicalistas. El PSI les ha expulsado inmediatamente del partido, mientras los magistrados han declarado que no es improbable que existan elementos que se infiltran dentro de los partidos de izquierda.