La OUA puede acordar una reunión extraordinaria sobre el conflicto del Sahara

Más de veinte jefes de Estado africanos, de los cuales la mitad se encuentran ya en Monrovia, confirmaron su intención de tomar parte en esta XVI cumbre de la OUA considerada como crucial para la evolución de la organización.

Otros diez mandatarios más podrían añadirse a los veinte, si no fallan las estimaciones del secretariado de la organización, con lo cual se confirmaría que esta reunión cimera ha despertado gran interés.A las pocas horas de comenzar oficialmente las sesiones de la cumbre, se piensa que los jefes de Estado podrían decidir la celebración de una reunión extraordinaria dedicada al Sahara, con lo cual se vería cumplida la decisión adoptada por la cumbre de Port Louis, en 1976.

Ayer llegó a Monrovia, Mohamed Abdelaziz, secretario general del Frente Polisario, que ha venido a presidir la delegación que ya se encontraba aquí, encabezada por el ministro de Exteriores, Ibrahim Hakim. La llegada de Abdelaziz ha despertado cierta expectación y se tiene la impresión de que la cuestión será debatida, casi como último recurso, a fondo.

En realidad en el Unity Conference Center han dejado de tener lugar los contactos interesantes, que ahora se llevan a cabo en la zona residencial donde se alojan los presidentes. Según algunas fuentes próximas a la delegación marroquí, el Gobierno de Rabat estaría dispuesto a aceptar, bajo la presión, tanto de la ONU como la previsible de la OUA, el principio de la. celebración de un referéndum para la autodeterminación, a cambio naturalmente de un alto el fuego durante seis meses, como prevé la propuesta del comité de notables encargado de estudiar el tema del Sahara.

El rey Hassan II, que llega en principio hoy a Monrovia, se alojará probablemente, por razones de seguridad, en su barco particular, que ya se encuentra en Liberia. Su encuentro con Chadli, que se da casi por seguro en los medios de la conferencia, ha sido precedido sin embargo por la declaración conjunta firmada en Argel entre los presidentes Chadli y Nyerere, al término de la visita de este último a la capital argelina, y en la cual se reitera que para Argelia el problema del Sahara es de descolonización.

Los ministros marroquí y argelino de Asuntos Exteriores, M'Hamed Bucetta y Mohamed Ben Yahia, respectivamente, sostuvieron una conversación antes de finalizar la conferencia de ministros de la OUA, aunque al parecer Argelia, sin descartar el principio de la entrevista Hassan II-Chadli, ha precisado que el tema del Sáhara deberán tratarlo los marroquíes directamente con el Polisario.

Los ministros de Asuntos Exteriores concluyeron el domingo por la tarde su 33.ª sesión, con un día de retraso sobre el calendario previsto, debido a una huelga de veinticuatro horas del personal del secretariado de la OUA, que quería presionar con ella para que se resuelva en Monrovia sobre el aumento de salarios solicitado por ellos para hacer frente a los recientes aumentos de alquileres decididos por el Gobierno etíope.

Las numerosas resoluciones adoptadas por los ministros, que no serán hechas públicas hasta que no las aprueben o discutan los jefes de Estado, conciernen a la cuestión del Sahara, la creación de una agencia panafricana de noticias, la denuncia formulada por Benin contra Gabón por la expulsión de los refugiados beninenses de ese país, la queja introducida por Sudán contra un supuesto preparativo de invasión por parte de Etiopía y la cuestión de los refugiados, también suscitada principalmente por Sudán, que ha afirmado haber recibido ya a lo largo de toda la guerra etíope-eritrea unos 500.000, a los cuales han venido a añadirse unos 35 ugandeses desde que las tropas tanzanas derrocaron al ex presidente Idi Amin.

Entre los temas polémicos y no resueltos que han quedado para la decisión de los jefes de Estado figura la cuestión de la posición africana en la Conferencia del Mar. Los ministros de Asuntos Exteriores, sin haber logrado acuerdo entre los países con litoral y los que no lo tienen, acordaron al menos que se hagan todos los esfuerzos para que Africa adopte una posición común en la segunda sesión de la octava conferencia, que debió iniciarse el 16 en Nueva York. Mientras al parecer se discuten las compensaciones a ofrecer a los países enclavados por los que tienen litoral, los ministros recomendaron a todos los países africanos que adopten una posición común.

Otro tema en el que no hubo acuerdo fue la propuesta de creación de una fuerza panafricana a la manera de los cascos azules, que en la propuesta original debería depender del secretario general de la ONU. Las discusiones al respecto se extendieron sobre el alcance de dicha fuerza, sin que se llegase a un compromiso sobre si debía ser para intervenir en los conflictos entre Estados o para la liberación de Africa aún bajo colonización.

La cooperación árabe africana ha sido asimismo objeto de importantes discusiones, sobre todo tras la propuesta inicial de que se excluyera a Egipto de la OUA, formulada por los países árabes más radicales. Después de haber reconocido el derecho de Egipto a recuperar sus tierras por los medios que crea convenientes, la resolución ministerial critica sin embargo el tratado egipcio-israelí, a la par que ratifica que sólo los palestinos, y la OLP en nombre de éstos, están legitimados para discutir directamente sobre su propio futuro.