_
_
_
_

Normas para el desarrollo del concurso de ganaderías

Esta tarde se celebra la corrida de la Prensa

Esta tarde se celebra la corrida de la Prensa, en la que intervienen José Fuentes, Gabriel de la Casa y José Antonio Campuzano. El festejo tiene carácter de concurso de ganaderías, y se lidiarán, por este orden, toros de los siguientes hierros:

Eduardo Miura, de Sevilla. Divisa verde y negra. Antigüedad, 30 de abril de 1849. Procedencia, Alvareda y Cabrera, con reses de Vistahermosa. Toro Matabuy, número 65.

Victorino Martín Andrés, de Galapagar (Madrid). Divisa azul y encarnada. Antigüedad, 29 de mayo de 1919. Procedencia: Escudero Calvo, antes Albaserrada, que la formó con reses de Santa Coloma. Toro Misionero, número 156.

Señores Guardiola Dominguez, de Sevilla. Divisa azul y grana. Antigüedad, 8 de junio de 1949. Procedencia: Villamarta, posterior Carlos Núñez y marqués de Villabrágima. Toro Vocerito, número nueve.

Cortijoliva, de Talavera de la Reina (Toledo), propiedad de Joaquín Rodríguez Gómez. Divisa blanca, amarilla y morada. Antigüedad, 23 de junio de 1949. Procedencia: Contreras, aumentada con vacas y semental de Lisardo Sánchez, procedencia: Urquijo-Atanasio Fernández. Toro Malagueño, número 78.

Hijos de Celestino Cuadri Vides, de Trigueros (Huelva). Divisa morada, amarilla y blanca. Antigüedad, 8 de abril de 1956. Procedencia: Celestino Cuadri, formada con vacas y sementales del conde de Santa Coloma. Toro Arenoso, número catorce.

Murube, propiedad de José Murube Escobar, de Sevilla. Divisa azul celeste, amarilla y encarnada. Antigüedad, 25 de octubre de 1970. Procedencia: Pilar Herráiz, Carlos Urquijo y Carmen de Federico. El toro Almejillo, seleccionado para esta corrida, se lesionó al ser desembarcado y ha sido sustituido por otro del mismo hierro.

Normas para la corrida-concurso

La Asociación de la Prensa, organizadora del festejo, ha hecho públicas las normas para la corrida-concurso, que extractamos en el párrafo siguiente. También manifiesta que cada toro ha sido elegido, en atención a su trapío y nota, por el ganadero respectivo, el cual se responsabiliza de la presentación del astado que competirá en bravura con las reses de otros hierros, tipos y castas.

1. Conforme al reglamento vigente, los toros que se lidiarán en esta corrida han de tener de cuatro a seis anos y peso mínimo de 460 kilos. Por la pizarra de chiqueros y los altavoces de la plaza, antes de la salida de cada res, se informará al público de la ganadería a que corresponde, nombre, número y peso.

2. Para la realización de la suerte de varas, el picador no rebasará el círculo exterior dibujado en el ruedo y el toro será situado dentro del círculo interior. Cuanto de más lejos se arranque el toro al caballo, con mejor puntuación calificará el jurado su bravura. No será válido el puyazo a toro corrido. Será indispensable, para optar al premio, que el toro vaya al caballo un mínimo de« tres veces en las condiciones antes señaladas. Por indicación de la presidencia y con el acuerdo del jurado, el picador podrá utilizar el regatón de la vara.

3. En caso de fuerza mayor que obligara a la lidia del sobrero, se hace advertencia de que éste no entra en concurso.

4. El jurado -cuyo fallo es inapelable- podrá declarar desiertos los premios establecidos, que consisten en placas de plata para el toro más bravo, mejor lidiador, mejor picador, mejor subalterno a pie y mejor estocada. Finalizada la corrida, el jurado, a través de los altavoces, dará a conocer el fallo. El acto de entrega de premios se celebrará en la Asociación de la Prensa, en fecha que en su día se hará pública.

Indulto

El Ministerio del Interior ha autorizado la concesión del indulto de las reses que por su excepcional bravura se hagan acreedoras al mismo. Corresponde al público solicitarlo, y a la presidencia concederlo, según su criterio y previo asesoramiento del jurado. La petición de indulto la manifestará el público agitando pañuelos blancos y la concesión se hará, en su caso, durante el último tercio, para lo cual la presidencia exhibirá un pañuelo azul. Otorgado el indulto, el espada ejecutará la suerte de matar, simulándola con una banderilla, y a continuación se retirará a las tablas, mientras el toro es devuelto al corral. Si la faena hubiera sido merecedora de trofeos, éstos serán simbólicos y se concederán por el procedimiento habitual.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_