Mañana se celebra en Las Ventas la tradicional corrida de Beneficencia

La tradicional corrida de Beneficencia se celebra mañana en Las Ventas. La Diputación ha preparado un cartel de mucho interés, pues figuran dos de los grandes ausentes de la feria de San Isidro, y actúa como director de lidia un espada veterano y popular -Sebastián Palomo Linares-, el cual quedó prácticamente inédito en la mencionada feria, pues resultó cogido de consideración en el primero de sus toros.

También, por lo que respecta al ganado, tiene alicientes este festejo, dado que se lidian los toros de Ramón Sánchez, que en San Isidro salieron muy bien presentados y dieron excelente juego. Con estas reses, si su comportamiento es similar, puede darse por seguro que la corrida de mañana será un gran espectáculo. José Luis Galloso, segundo espada del cartel, es muy variado en la ejecución de las suertes, sobre todo con el capote, y tiene lances de personalísima ejecución y originalidad. Julio Robles, que completa la tema, es uno de los diestros de más calidad con que cuenta el actual escalafón; en la línea del toreo clásico, es un estilista de la verónica y con la muleta ha conseguido faenas de verdadero virtuosismo.Los toros, de Ramón Sánchez Recio, de Sevilla, procedencia Manuel Arranz, tienen antigüedad de 25 de agosto de 1929, divisa verde y grana, señal ahigarado en ambas orejas. Son nueve las reses que se desembarcaron ayer en Madrid y todas ellas pasaron sin problemas el reconocimiento veterinario.

Asistirán a la corrida los Reyes de España, y presidirá el director general para la Seguridad del Estado, asesorado por uno de los comisarios del equipo que habitualmente preside los festejos taurinos en las plazas de Madrid. La corrida, que empezará a las seis y media de la tarde, será televisada en diferido.

La organización de la corrida de Beneficiencia ha sido muy complicada, no sólo porque, una vez celebrada la feria de San Isidro, es difícil contratar a los principales toreros para Madrid, sino porque los representantes de la Diputación han tenido muy poco tiempo para hacer todas las gestiones.

Las inició el socialista José Beato, que llegó a apalabrar algunos toreros y a ver varias corridas de toros. Luego se nombró al diputado del IPCE Luis Larroque, vicepresidente de la Corporación y visitador de la plaza de Las Ventas, con lo cual entró en la esfera de su responsabilidad la organización de la corrida.

Naturalmente, los criterios de organización fueron distintos. Larroque encargó la contratación de toros y toreros al crítico taurino de Mundo Obrero José Boloix, el cual, en un espacio de tiempo muy corto, recorrió miles de kilómetros, por las distintas zonas ganaderas, para ver toros y seleccionar aquellos que por prestigio de la divisa y trapío podían valer para Madrid. Finalmente, vió y reseñó la corrida de Ramón Sánchez.

La contratación de toreros también fue laboriosa, pues los que se consideran primerísímas figuras ponían toda suerte de dificultades. La razón es la de siempre: después de salir de la feria de San Isidro con su cartel robustecido prefieren no ponerlo en juego, de nuevo, ante la afición de Madrid. De cualquier forma, Boloix tenía claro que los tres, toreros que mañana harán el paseíllo en Las Ventas son apropiados para la corrida de Beneficencia, por los motivos que ya hemos apuntado. Se trataba, en definitiva, de rematar lo mejor posible la combinación de espadas, y así ha sido: Palomo-Galloso-Robles es un buen cartel para Madrid, con garantías suficientes para que el resultado artístico sea del agrado del público, naturalmente dentro de las enormes límitaciones que siempre tiene cualquier tipo de pronóstico respecto a una corrida de toros, cuyo desarrollo está lleno de imprevistos.

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