Otelo Saraiva de Carvalho, separado del Ejercito portugués
El comandante de Artillería Otelo Saraiva de Carvalho, estratega de la revolución portuguesa dei 25 de abril de 1974, ha sido separado del servicio activo en el Ejército portugués, se anunció anoche en Lisboa.
Juzgado hace quince días por el Consejo Superior de Disciplina del Ejército, este organismo ha considerado que Otelo, el militar que simbolizaba ante la opinión pública la «revolución de los claveles», «no reúne las condiciones morales y profesionales para seguir siendo oficial».El jefe del Estado Mayor del ejército de tierra ordenó ayer el pase de Saraiva de Carvalho a la situación de reserva.
Desde la primavera de 1974 los autores materiales del golpe militar que acabó con la dictadura salazarista en Portugal han sido poco a poco relegados de las posiciones claves, después de la depuración militar que siguió a los acontecimientos del 25 de noviembre de 1975, que marcó el punto de inflexión de la revolución portuguesa. De aquel grupo de militares sólo el capitán Vasco Lourengo, actual gobernador militar de Lisboa, conserva un puesto de mando directo de tropa, mientras que algunos otros son miembros del Consejo de la Revolución, que desempeña únicamente una función de vigilancia del cumplimiento de la Constitución.
Otelo Saraiva de Carvalho estaba acusado, entre otras cosas, de no haber impedido que tropas a sus órdenes, en concreto la Policía Militar, infligiese malos tratos a detenidos.
El pasado mes de abril, la Asamblea de la República aprobó, con el voto favorable de socialistas y comunistas, una ley de amnistía militar en virtud de la cual, y coincidiendo con el quinto aniversario de la revolución, serían canceladas las responsabilidades penales de todos los oficiales implicados en el intento derechista del 11 de marzo de 1975 y del izquierdista de noviembre del mismo año. Argumentando que las acusaciones contra unos y otros no eran comparables, partidos de la derecha y las jerarquías militares conservadoras presionaron sobre la presidencia de la República, que se negó a ratificar la ley aprobada en el Parlamento.
Oficial colonial
Otelo Saraiva de Carvalho nació en Mozambique hace 43 años.
Realizó prácticamente toda su carrera militar en las colonias portuguesas. Su destino en Guinea-Bissau le permitió tomar contacto con los generales Spínola y Costa Gomes, pasando a formar parte del núcleo originario de la «revolución de los claveles».
Entonces capitán, desempeñó un papel de primer orden en la caída de la dictadura. El 24 de abril, un día antes del golpe, fue designado, por los doscientos oficiales del Movimiento de las Fuerzas Armadas, responsable militar del comité ejecutivo. El 17 de julio fue puesto al mando del Copcon (Comando Operacional del Continente), instrumento clave en la dirección y control de la nueva situación portuguesa. Ascendido a general, pasó a formar parte del triunvirato militar con el general Costa Gomes y Vasco Gongalves.
En marzo de 1975 reprimió el golpe de Estado promovido por el general Spínola, pero su progresivo izquierdismo le llevó a participar en el intento golpista de noviembre del mismo año. Sometido a varias acusaciones, fue detenido y separado del mando activo. En 1976 presentó su candidatura a la presidencia del país, apoyado por los grupos de Dinamización de Unidad Popular.
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