El Ayuntamiento de Ascó ordena la demolición de la central nuclear

El Ayuntamiento de la localidad de Ascó (Tarragona) envió ayer un oficio a los responsables de la central nuclear que se construye en este término municipal, comunicándoles la decisión tomada por el consistorio en pleno de ordenar la demolición de las obras del grupo uno de la central.

El Ayuntamiento, formado por cinco miembros de una candidatura antinuclear y concejales de Convergencia Democrática, Unión de Centro Democrático y Esquerra Republicana, adoptó el acuerdo de demolición después de que la central nuclear no atendiera el requerimiento efectuado por el Ayuntamiento hace dos meses para que modificara diversas construcciones no ajustadas al proyecto.El alcalde de Ascó, Joan Carranza, explicó anoche a EL PAIS el alcance de la decisión municipal. «El acuerdo», dijo, «es totalmente legal. Hace meses, una comisión municipal inspeccionó las obras del grupo A scó uno de la central, comprobando el arquitecto y el ingeniero que en muchas construcciones no se respetaba la licencia concedida por el anterior Ayuntamiento y que en otras se construía ilegalmente. Les dimos un plazo para que presentaran una solicitud de adecuación y permiso de las obras y no lo han hecho.»

Según el alcalde, los responsables de la central tienen ahora un plazo para recurrir ante la alcaldía y, con posterioridad, acudir a la vía contencioso-administrativa.

Por otra parte, las obras del grupo Aseó dos tienen denegada la licencia de obras por el Ayuntamiento, denegación que ha sido objeto de un recurso por parte de la central, el cual se encuentra en la actualidad en la sala uno de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Territorial de Barcelona.

« La demolición de las obras », explicaba Joan Carranza, «afectaría a casi todo el grupo uno de la central, y se debe a que lo que no ha sido construido sin permiso lo ha sido en ubicaciones diferentes a las solicitadas inicialmente.»

Por su parte, los responsables de la central nuclear de Ascó minimizaban ayer la decisión del Ayuntamiento. En concreto, el director de obra de la central Aseó uno, señor Hausman, señaló a EL PAIS que la orden de demolición, en todo caso, no afectaría a obras sustanciales de la central. «Se trata», dijo, «de obras auxiliares, de menor cuantía», remitiendo cualquier opinión sobre el tema al encargado por la central para las relaciones con el Ayuntamiento de Ascó, persona que resultó ilocalizable anoche.

La central nuclear de Ascó cuenta con dos grupos, Ascó uno (FECSA) y Aseó dos (FECSA, Hidroeléctrica de Cataluña e Hidroeléctrica del Segre), y desde el inicio de su construcción ha contado con la oposición de la población de Ascó y de los restantes pueblos de la comarca, y durante los dos últimos años la central ha sido objeto de las protestas de los movimientos ecologistas.

Ha sido convocada para el próximo viernes una manifestación en la plaza Mayor de Vich (Barcelona), en protesta por los intentos de explotación de uranio en la zona.