En el año 1990, la energía de radiación solar será rentable

En el año 1990, un litro de petróleo costará 0,7 dólares (46 pesetas), lo que supondrá un costo de veinte centavos (trece pesetas) por cada vatio eléctrico producido con las habituales fuentes energéticas. Pues bien, para esa fecha un vatio eléctrico de origen fotovoltaico, es decir, obtenido mediante el aprovechamiento de la solar, tan sólo costará ocho centavos (algo más de cinco pesetas). Estos datos han sido suministrados a la opinión pública por el doctor Rodot, director de PIRDES, organismo del CNRS (equivalente francés al Consejo Superior de Investigaciones Científicas), en el curso de una de las sesiones del seminario que se ha desarrollado en Madrid.Según el doctor Rodot, en Francia ya se ha logrado ahorrar tres millones de toneladas de petróleo al año con el empleo de la energía solar mediante el procedimiento de bioconversión.

La crisis energética ha activado la polémica mundial sobre el futuro de la especie humana en el campo de la obtención de energía, respecto a las diversas fuentes y métodos existentes para ello. Si bien una situación crítica era esperada hacia finales de la década de los años ochenta, el disparo del consumo ha provocado que se adelante la crisis. Un dato anecdótico ilustra lo dicho: si todos los países transformaran energía al ritmo de Estados Unidos, las reservas petrolíferas se agotarían en diez meses.

Alternativa real

La energía solar es, evidentemente, una alternativa. El sol radia incesantemente la energía suficiente para las necesidades humanas, sin límite previsible en su funcionamiento. Pero la obtención de energía eléctrica a partir de la solar, lo que constituye el proceso de conversión, requiere serios gastos de instalación. La energía de origen fotovoltaico sólo va a poder ser rentable cuando se prevean períodos de amortización. Hoy, ese período está en torno a los doce años. Según el profesor Rodot, nadie duda que una de las mayores ventajas de la energía solar es su limpieza y sus posibilidades autónomas e independientes; el período de amortización se acortará a un año, dentro de una década. Eso ofrecerá rentabilidad, seguridad y posibilidades de descentralización en el campo energético excepcionales. Para ello, sólo se requiere el necesario desarrollo teórico, por el que han pasado los otros métodos de obtención de energía: fuentes petrolíferas, nucleares, etcétera.Los terrenos en los que es posible la aplicación de la energía solar están en función de las situaciones y de los distintos grados de insolación. A la altura de 1979, la energía solar se revela altamente útil en aquellas zonas alejadas de las fuentes tradicionales de obtención de energía en las que no se necesite una alta densidad energética, pero sí cierta necesidad de potencia y en las que los gastos de instalación de métodos fotovoltaicos sean inferiores a los de la toma de línea respecto a las fuentes clásicas.

Disminución de precios

Según el mencionado investigador francés, los objetivos fundamentales de la industria fotovoltaica no se reducen tanto a la consecución de aumentos de eficiencia en los métodos empleados para la conversión, como a la disminución de precios del kilowatio. Los objetivos a alcanzar son los quinientos dólares por kilowatio (33.000 pesetas) o los trescientos dólares (20.000 pesetas) si se utilizan materiales semiconductores baratos como el sulfuro de cadmio. Estos objetivos están propuestos para ser conseguidos antes del año 1986. No debe olvidarse que estas cifras se refieren a los gastos de instalación puesto que posteriormente la recepción de energía es gratuita e ilimitada, salvo gastos de mantenimiento, reparación, etcétera. El costo anteriormente señalado de quinientos dólares por kilowatio, a un 10% de eficiencia (lo que no es considerado por los especialistas como utópico sino real) equivaldría a 4,22 pesetas por la instalación productiva de un kilowatio.

Nuevas fuentes de energía

El seminario sobre el futuro de la industria fotovoltaica ha convocado en Madrid, bajo el patrocinio del Centro de Estudios de la Energía del Ministerio de Industria, a especialistas internacionales en la materia como E. L. Burgess, de Contractor for Concentratio Projeets Sandia Laboratories, Alburquerque (EEUU); Fisher (Alemania), J. V. Goldsmith (EEUU), A. Luque, catedrático- d¡rector del laboratorio de semiconductores de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación, de Madrid; Van Overstraeten, presidente del Comité de Trabajo Fotovoltaico de las Comunidades Europeas; el doctor Temboury, director del Centro de Estudios de la Energía, y el mencionado doctor Rodot.Entre los temas que han sido tratados están los sistemas fotovoltaicos como fuentes de energía para usos terrestres; la fabricación de sistemas fotovoltaicos y las aplicaciones de estos sistemas. El seminario se ha propuesto «establecer el estado actual y perspectivas futuras de los generadores fotovoltaicos de energía solar para usos terrestres. Para ello se ha invitado, con el asesoramiento del Comité Científico, a una serie de ponentes de la más alta cualificación internacional que presentarán el estado de los generadores fotovoltaicos como fuentes de energía para uso terrestre, sus posibles métodos de fabricación y los aspectos económicos, mercados previsibles y acciones legales que pueden promocionar su desarrollo, con especial referencia al marco español e iberoamericano».