Los aviones DC-10 de Iberia vuelven a volar
La mavoría de los aviones DC-10 matriculados en Norteamérica emprendieron vuelo en la mañana de ayer una vez revisados a fondo. Por su parte, la compañía española Iberia puso en funcionamiento por la tarde sus seis DC-10, tras dos revisiónes ordenadas por las autoridades aeronáuticas, sin que se encontraran anomalías.Las inspecciones de los DC-10 deberán repetirse en Estados Unidos cada diez días o cada cien horas de funcionamiento, un período desacostumbradamente breve para este tipo de revisiones. Para la mañana del viernes se espera que todos los aviones DC- 10 que hayan pasado sin problemas la revisión estén volando en EEUU, con lo que se normalizará la situación. La Administración Federal de Aviación reveló ayer que desde 1974 había recibido informes de problemas del ensamblaje del reactor en las alas del DC- 10 en 62 ocasiones, aunque un portavoz indicó que, si se tiene en cuenta que son 134 aviones durante un período de cinco años. los problemas registrados «no son numerosos».
Pasa a página 3
Los DC-10 norteamericanos vuelven a volar
(Viene de primera página)La inspección de todos los aviones del modelo DC-10 ordenada por las autoridades federales de aviación civil permitió encontrar deficiencias en los sistemas de montaje y sujeción de los reactores, en un número indeterminado de aparatos, mientras que la mayoría de ellos superaba la revisión y volvía a volar ayer mismo.
Algunos de estos defectos detectados en los aviones fueron calificados como «menores», pero el portavoz reconoció la existencia de problemas «importantes» en otros aparatos. Muestras de corrosión, algunas grietas y la pérdida de algún tornillo parecían ser los defectos más importantes localizados en la flota norteamericana de DC-10, un 40% de los cuales había vuelto a entrar en servicio en la mañana del jueves.
El diario Washington Post, que citaba a un alto cargo de la Administración Federal de Aviación como fuente de su información, calculaba entre quince y veinte el número de aparatos en los que se comprobaron deficiencias en el sistema de ensamblaje de los reactores con las alas.
La rotura de este sistema fue la causa que provocó la pérdida de un reactor y la consiguiente catástrofe de un DC- 10 de American Airlines el pasado viernes en el aeropuerto O'Hare, de Chicago. La cifra de víctimas de este accidente aumentó ayer en una, totalizando 274, después de que se descubriera el cadáver de un niño que no estaba registrado entre los pasajeros.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.