Ramírez Heredia y el andalucismo
En su número del 5 de mayo, el periódico incluye una carta de Angel Rodríguez Díaz, que responde a un artículo del diputado por Almería Juan de Dios Ramírez Heredia.Desearía puntualizar que, si bien el PSA ha tenido un peso muy importante en la construcción del andalucismo, por fortuna para Andalucía no ha sido ni el primero ni el único. Ambos comunicantes mencionados pueden hacer suponer esto, que supondría para An-
(Pasa a página 12)
(Viene de página 11)
dalucía el no haber tenido conciencia propia, ni antes ni fuera del PSA. No obstante, tal aseveración, en la pluma del señor diputado, sí prueba una cosa: la clara inoperancia de la casi totalidad de los partidos políticos respecto a Andalucía y andalucismo.
Aquí, posiblemente, Angel Rodríguez ha olvidado el detalle. Juan de Dios Ramírez no puede ver el andalucismo -más que desde una óptica interclasista, por dos razones: porque así lo entendió, cuando intentó capitalizar para la UCD los votos de los emigrantes andaluces en Cataluña, cuando luego acusó a Andalucía de haberle «abandonado» y agradeció a Cataluña el haberle «acogido». Y porque así, de camino, puede justificar (o intentar justificar) la inexistencia de un trabajo por Andalucía en un partido como el suyo -el PSOE-, al que se pasó después de su fracaso lerrouxista en la UCD, que se autodefine marxista, y, por tanto, de clase, aunque sólo sea programáticamente.
Lo que no sabemos es cómo intentan justificar su actitud antiandaluza diputado y partido, cuando no, tienen un mínimo programa andaluz en las Cortes ni fuera de ellas, cuando no se han preocupado ruín mínimamente de la cultura andaluza ni de ninguna manifestación cultural popular, cuando sus análisis económicos se reducen -si acaso- a constatar hechos, a veces, otras a criticar a un capitalismo que en Andalucía ni existe casi. Cuando no han ni presentado todavía el más mínimo programa económico para Andalucía. Y, para colmo, mantiene la necesidad de que el emigrante se integre en la tierra donde emigró y abandone su procedencia. ¿No es esto un monumento a la emigración?
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