Un hito histórico

«Desde aquel 20 de noviembre en que quedó definitivamente arrumbado el viejo régimen se han producido muchos "hitos históricos" a los que se adjudicó el carácter de "alumbradores de la nueva etapa democrática". Legalización de partidos, elecciones generales, referéndum, Constitución..., todos han sido pasos inexcusables para el logro de esa nueva etapa, pero, al mismo tiempo, todos ellos han mantenido un cierto distanciamiento de los ciudadanos, de las masas populares. Todos han quedado, en gran medida, encerrados en grandes caserones desconocidos o cerrados para la mayoría de la población. Ahí estriba la enorme diferencia de este paso que acaba de dar el pueblo español. Los ayuntamientos no pueden quedar encerrados y están en todos y cada uno de los pueblos de España. Con ellos, la democracia ha llegado realmente hasta los más recónditos rincones de nuestra geografía.Y es precisamente la llegada de la izquierda a esos ayuntamientos, de las fuerzas progresistas, la más firme garantía de que esa democracia va a ejercerse y va a funcionar. El acuerdo concretado entre el PCE y el PSOE, abierto a todas las fuerzas progresistas de las distintas nacionalidades Y regiones, puede, por primera vez en este país en más de cuarenta años, marcarse un objetivo cuya consecución depende, fundamentalmente, de su propia actuación: la democracia plena de los municipios. Esta es la diferencia fundamental que marca un hito realmente importante y que supone un giro en el panorama político español. La oposición, en sectores fundamentales del desarrollo de la vida comunitaria, no actúa ya como tal oposición, sino como Poder, colocando, al mismo tiempo, al hasta ahora único detentador de ese Poder, en la oposición. Se con figura de esta forma, observando ya todo el panorama político na cional, un sistema de "garantías democráticas" que todos, Poder y oposición, en la vida pólítica gene ral y municipal, tendrán que tener en cuenta.»

20 abril