España va a empezar a fabricar misiles

«En el campo de los misiles vamos a empezar a introducirnos y en él intervendrán todas las industrias de defensa. Concretamente, la Empresa Nacional Santa Bárbara está en disposición de acometer la fabricación de misiles», afirma el presidente del Instituto Nacional de Industria (INI), José Miguel de la Rica, en unas declaraciones a la revista militar Reconquista.«En todos los países del mundo y, naturalmente, en España, las industrias de defensa deberían equilibrar la crisis actual, ya que, por lo que a nosotros se refiere, tanto el Ministerio de Defensa como el del Interior están menos dotados de lo que necesitarían y, precisamente por eso, estamos trabajando intensamente en esa línea», dice también el presidente del INI,

El volumen de ventas de los sectores de fabricación de armamento material de defensa del INI ascendió el año pasado a 46.000 ó 47.000 millones de pesetas, y dieron trabajo a 26.000 personas.

Las tres grandes empresas del INI en el sector de defensa son las empresas nacionales Santa Bárbara y Bazán (con una participación del ciento por ciento) y Construcciones Aeronáuticas, SA (CASA) (con participación de los dos tercios del capital). Otros grandes sectores del INI para la defensa son los de la electrónica y óptica (que constituirán una futura empresa mediante la fusión de las actuales EISA, EESA y ENOSA), el de la informática (SECOI'NSA y ERIA), automoción militar (ENASA) y el Centro de Investigación y Desarrollo de Armamento (Cetme).

De los sistemas de armas desarrollados y fabricados -por estas empresas, el señor De la Rica destaca las corbetas Descubierta, los aviones C-212 y C-101 y los fusiles de asalto Cetme de 7,62 milímetros y el nuevo de 5,56. Las corbetas, el avión de transporte y los fusiles de asalto «han tenido incidencia en el mercado internacional».

«Las industrias se encuentran capacitadas para producir bajo licencia porcentajes muy altos de las nuevas armas de la década de los ochenta», asegura el presidente del INI. «Un plan de modernización de nuestras Fuerzas Armadas mejoraría fundamentalmente nuestra tecnología, con aplicación no sólo a la industria militar, sino, en general, a todas las industrias punta.»

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