China vuelve al movimiento olímpico

, China ha sido readmitida en el COI sin que Taiwán tenga que ser expulsada del movimiento olímpico. Ambos países, por tanto, estarán en los Juegos de Moscú. Lo único que queda por resolver es bajo qué bandera e himno participará Taiwan ya que China pretende que lo haga con sus emblemas. La independencia que concede a la isla sólo es refenda. a la participación deportiva.La resolución adoptada tras largas deliberaciones por el COI en Montevideo establece: 1, reconocer al Comité Olímpico Chino (Pekín); 2, mantener el reconocimiento del Comité Olímpico radicado en Taipeh; 3, todos los aspectos referidos a cambios de nombre, himnos, banderas y estatutos serán estudiados posteriormente. Según estableció en conferencia de prensa Lord Killanin, presidente del COI, China varió su posición inicial, permitiendo que Taiwán manejara los asuntos deportivos de la isla, independientemente de Pekín.

Hasta tanto se tome una decisión definitiva sobre el problema, Lord Killanin descartó que hubiese habido presión del plenario sobre los delegados de China para efectuar esa concesión que dejó la puerta abierta al diálogo y que signficó, sin duda, un importante avance, lo que no implica que se haya encontrado la salida definitiva, porque el Comité Olímpico de Taiwán aseguró que no aceptará llamarse como tal en un futuro porque no cubre solamente a la isla de Taiwan sino también a otras.

La búsqueda de una solución definitiva está ahora en manos de la comisión ejecutiva del COI, que oportunamente podrá consultar a los miembros del plenario. Admitió también el presidente del organismo olímpico que no será fácil: «Surgen problemas dado que sea cual sea la resolución, nunca se podrá unificar las dos, Chinas. Por más que algunos digan que no debe ser así la decisión, será política porque éste es un problema que, además, no lo creamos nosotros.» La votación final dice a las claras que las opíniones estuvieron divididas: 36 votos a favor y veintiocho en contra.

Por tanto es posible extraer algunas conclusiones. La fundamental, que China, aunque temporalmente, aceptó por primera vez la existencia de la isla de Taiwan como territorio independiente. Ello se infiere de la resolución que, con anuencia de los dirigentes olímpicos de Pekín, adoptó el Comité Olímpico Internacional en el sentido de que China y Taiwan deben coexistir en el movimiento olímpico.

La histórica decisión de China tendrá repercusiones en el ámbito de la política mundial por cuanto es la primera vez que reconoce a la isla el derecho a integrar independiente de ella un organismo intemacional.

La razón fundamental de esta urgencia de Pekín por reingresar al organismo del que se retiró voluntariamente y por razones claramente políticas en 1958, es que China quiere estar presente con sus atletas en los Juegos de Moscú. A nadie escapa la realidad de que las decisiones del COI están teñidas por el color de los designios de la alta política internacional. En ese plano, China está empeñada en un enfrentamiento a todos los niveles con la Unión Soviética. Triunfar en las competencias olímpicas de Moscú y derrotar a sus enemigos en su propio reducto, implicarían un éxito fácilmente capitalizable.