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Ocupan pisos que debían haber sido entregados hace cinco años

Varias familias que esperan desde hace cinco años que les sea entregada una vivienda en el parque de María Luisa, por la que vienen pagando desde entonces, se han encerrado en los pisos, aún sin terminar. El problema afecta a noventa y seis familias. La empresa promotora, Parque de María Luisa, integrante del holding Agracón, suspendió pagos. El próximo día 9 de mayo, fecha en que vence el plazo de la suspensión de pagos, los pisos pasarán a engrosar la lista de bienes para resarcir a los acreedores de la citada empresa, sin que los pisos puedan ser disfrutados por las familias que los han pagado. Las viviendas origen de este problema se sitúan entre Peña Grande y Valdezarza, en la llamada Ciudad de los Poetas.La historia empezó entre 1973 y 1974, cuando se vendieron los pisos, tras una campaña de propaganda en la prensa. Las condiciones no eran malas y pronto se cubrió la oferta de viviendas.

Las obras, que ahora están paralizadas, constituían la tercera fase de la urbanización Ciudad de los Poetas. La primera fase había sido entregada y la segunda se encontraba muy avanzada en 1974.

En el contrato que los compradores firmaron con la empresa Parque de María Luisa se especificaba que los pisos serían entregados en julio de 1975. Al llegar dicha fecha y no ser entregadas las viviendas, los afectados reclamaron sus derechos, encontrándose con que la empresa ni siquiera había cubierto la póliza aseguradora de las cantidades entregadas, violando la ley.

Querella

Los afectados decidieron interponer una querella criminal en el Juzgado de Instrucción número 2 de Madrid, por si hubieran sido víctimas de una estafa en toda regla. Estamos ya en 1976 y el holding ha suspendido pagos. El panorama era muy negro. En 1979 todavía no se ha visto la causa.Para la tercera fase se consiguió un crédito del Banco Hipotecario por valor de 47 millones de pesetas, que posibilitaba la continuación de las obras.

En junio de 1977, las familias afectadas volvieron a recuperar la ilusión al ofrecerles la empresa un anexo del contrato con una compensación en los pagos, y la promesa, recogida en una cláusula escrita, de que los pisos serían escriturados públicamente a nombre de los compradores en el plazo de dos meses (agosto de 1977) y entregados en diciembre de 1978.

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Los afectados, que han seguido pagando las letras, se han encontrado hasta ahora con violaciones constantes de los acuerdos. En diciembre de 1978, Parque de María Luisa no sólo no entregó los pisos, sino que ni siquiera ofreció un nuevo plazo. Las obras, que están muy cerca de su terminación, se vieron súbitamente detenidas en enero de 1979, al existir problemas de pagos de Parque de María Luisa a la empresa constructora Helma también en suspensión de pagos y que despidió a todos sus obreros el pasado mes de febrero. Las letras pagadas por los afectados ya han sido negociadas por la empresa y las no pagadas ya han sido reclamadas hasta por la vía judicial por los bancos que las poseen.

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