Los países de la OPEP estudian aumentos de precios y reducciones de producción

Los rumores más pesimistas que circularon previamente al inicio de la reunión de los países de la OPEP, en Ginebra, parecían confirmarse a últimas hora de ayer, ya que los delegados de los trece países miembros de la Organización estudiaron la posibilidad de incrementar los precios entre un 15% y un 30%, así como aplicar criterios restrictivos en los niveles actuales de producción. Como dato revelador de la conferencia hay que destacar la pérdida de fuerza de Arabia Saudita, uno de los tradicionales moderados del grupo de países productores, que ya no cuenta con el habitual apoyo de Irán. El cambio de régimen político en Teherán, con el acceso al poder del Gobierno fiel a Jomeini, se perfila como el motor de los posibles acuerdos de conferencia.

Aunque la reunión de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que se inició ayer en Ginebra, fue convocada con carácter de consultiva, todo hace prever que de ella saldrá un aumento del precio del barril que podría oscilar entre los quince y los 15,5 dólares, a partir del primero de abril próximo. Es decir, adoptaría un aumento de un 15 % aproximadamente. Una determinación en tal sentido, que circuló ayer como muy probable, sobrepasa el esquema de aumentos acordado por la OPEP en la reunión de Abu Dhabi en diciembre de 1978, hace sólo tres meses.Según el acuerdo de Abu Dhabi, el precio por barril aumentaría a 13,84 dólares el primero de abril del presente año; a 14,10 el primero de julio próximo, y a 14,54, el primero de octubre, último alza programado en esa oportunidad para el año 1979.

Pocas reuniones de la OPEP han comenzado en un clima de tal suspense como el actual. A los pocos minutos de iniciada, varias delegaciones, encabezadas por las de Irak y Libia, pidieron que la reunión cambiara su carácter consultivo por el de un consejo o asamblea de carácter extraordinario. De acuerdo con el reglamento eso permitiría tratar de inmediato un alza de precios.

Arabia Saudita pierde fuerza

El jeque Yamani, jefe de la delegación de Arabia Saudita, conjuntamente con su colega de Qatar, se mostraron contrarios, pero, sin embargo, aceptaron someter el tema a votación, anunciando que acatarían la decisión de la mayoría.

Al terminar la reunión de la tarde, pasadas las veintiuna horas, el problema reglamentario parecía superado u olvidado, entendiéndose que el problema de los precios fue abordado prioritariamente, lo que hace aparecer a Arabia Saudita en una posición debilitada, específicamente porque su tradicional aliado, Irán, después de la caída del sha ha dejado de sustentar posturas moderadas.

El nuevo ministro de Economía de Irak, así como el director del Banco Central de ese país, hablaron frente a la prensa del establecimiento de «precios justos y razonables», sin indicar cifras precisas. De fuentes oficiosas, sin embargo, se supo que Irán aboga por 17,20 dólares por barril, lo que Argelia, que se encuentra en el grupo de los «duros», consideraría razonable.

También existiría en el grupo de países de la OPEP, algunas delegaciones que abogan por un precio de 16,50 dólares por barril. La proposición de Irán, como la del último grupo de países, significaría un alza entre el 25 y el 30% aproximadamente.

Irán controlará su producción

La delegación de Irán anunció que su país aumentará la producción a partir del próximo mes a un total de cuatro millones de barriles por día, de los actuales dos millones (incluidos los 700.000 barriles diarios de consumo interno). Sin embargo, dicha delegación advirtió que no cometerá la torpeza de llegar hasta los seis millones diarios de antes de la revolución, pues es necesario -afirmaron- equilibrar cuidadosamente la oferta y la demanda.

Al respecto, se habría formado un bloque de países en el interior del seno de la OPEP -Irak, Argelia y Libia-, que, junto con Irán, serían partidarios de disminuir las cuotas de producción de petróleo, existiendo consenso en la OPEP en todo caso, a no volver a la situación excedentara que se conoció antes de la crisis de Irán.

La reunión de la tarde de ayer, fue interrumpida alrededor de las 20 horas, mientras los delegados vieron por televisión la firma del tratado de paz entre Egipto e Israel, en un clima de descontento, que alguno de ellos confesaron al término de la sesión de trabajo.