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La policía francesa busca intensamente a los quince ex confinados de Valensole

Los quince refugiados vascos que desaparecieron en la madrugada del pasado sábado, cuando finalizaba el plazo impuesto por las autoridades francesas para que abandonaran los nueve departamentos del suroeste francés en los que se les prohibía la residencia, están fuera del alcance de la policía y permanecerán escondidos en tanto la Comisión para los Recursos de los Refugiados del Consejo de Estado no dé a conocer su veredicto sobre el recurso presentado por sus abogados contra las medidas de asignación de residencia.Por su parte, la mayoría de las fuerzas políticas vascas del otro lado de la frontera han convocado una manifestación para mañana en Bayona, para exigir el respeto a las leyes, así como el derecho de asilo y aplicación del estatuto de refugiado.

Según indicó a EL PAIS el abogado Jean Abeberry, el recurso presentado en París ante la oficina de la Comisión para los Recursos de los Refugiados del Consejo de Estado tiene carácter suspensivo, pero en la práctica la policía frances no lo respeta. Además, la Comisión para los Recursos, formada por un magistrado francés, un re presentante del Ministerio de Trabajo y un delegado del Alto Comisariado de la ONU para los Refugiados, sólo puede dar una «recomendación» al Ministerio del Interior sobre el caso recurrido, para que éste, en última instancia, decida las medidas a tomar.

«Estamos en una situación dramática -aseguró a EL PAIS un refugiado vasco "legal"-. El refugiado que vive en Euskadi norte no milita, pero el Gobierno español quiere cargar las tintas diciendo que esto es el santuario y lugar de reposo del guerrero. Y así, parece que la Administración francesa se ha decidido a erradicar el problema, pero, se puede dar el caso de que "el problema" se convierta en algo grave, ya que aquí, en Euskadi norte, hay mucha gente que está tomando conciencia.»

Desde la noche del pasado viernes, la policía francesa ha instalado controles tanto en las carreteras de la zona como en el interior de San Juan de Luz, Hendaya, Bayona y Biarritz. Al parecer, existe una lista con los nombres de treinta refugiados, entre los que figuran los quince desaparecidos, así como Mikel Goikoetxea y Martín Apaolaza, detenidos en Bayona y conducidos a la prisión de Baumettes, en Marsella, e Iñaki Martínez, confinado en el hotel Ecu de France, en Halluin, que deben ser detenidos a toda costa. Según indicó el prefecto de Pau al colectivo de abogados que lleva la defensa de los refugiados, el pasado martes, la policía francesa «no iba a parar hasta detener a todos los integrantes de la lista».

Las últimas acciones de comandos armados, presumiblemente de extrema derecha, contra algunos refugiados han aumentado el clima de inseguridad. Los barbouzes han actuado contra Etxabe, Peixoto, Argala, Pérez Revilla, Anai Artea y últimamente han intentado secuestrara la refugiada Arantxa Sasiain.

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