Washington entra en contacto con Jomeini

Mientras el Gobierno norteamericano parece haber llegado a la conclusión de que el ayatollah Jomeini es el factor decisivo en el futuro de Irán, la llegada a Estados Unidos del sha Mohamed Reza Pahlevi podría retrasarse o incluso suspenderse indefinidamente.

El ex ministro de Justicia norteamericano, Ramsey Clark, que estuvo en Teherán la semana pasada, se entrevistó ayer en las cercanías de París con el líder de la oposición religiosa iraní. Aunque en medios gubernamentales se insiste en que Clark no estaba desempeñando una misión oficial, se trata del primer contacto conocido del ayatollah con una personalidad política estadounidense desde que comenzaron los disturbios, que obligaron al sha a iniciar sus «vacaciones».

Durante la semana pasada se daba por seguro que, tras su escala en Marruecos, el monarca persa y un grupo de estrechos colaboradores se desplazarían a Estados Unidos invitados por el multimillonario Walter Annenberg. Sin embargo, la cadena de televisión ABC anunció el domingo, citando fuentes seguras, que el sha Reza Pahievi ha «pospuesto indefinidamente » su viaje a Estados Unidos.

De momento, la escala en Marruecos parece que se prolongará más de lo inicialmente previsto y que el sha permanecerá en este país entre tres y cuatro días, sin que se sepa con certeza cuál será su próximo destino.

Aunque la Administración Carter continua apoyando al Gobierno civil de Shapur Bajtiar, diversas informaciones apuntan hacia un deseo de Washington de negociar en lo posible con Jomeini, al que se ve como la clave para evitar la futura formación de un Gobierno antinorteamericano en Irán. La visita de Clark habría sido una primera aproximación y éste habría obtenido garantías del líder religioso de que la «república islámica» que propugna no se convertirá en un aliado de la Unión Soviética, pero habría vuelto a negarse a respaldar al Gobierno de Bajtiar.