Las ausencias y el tedio, protagonistas en el último pleno municipaI del año

El último pleno municipal del año tuvo ayer como nota característica la ausencia de quince concejales de la Corporación y la pasividad manifiesta de los restantes ediles. El tedio que acompañó a la sesión sólo se vio interrumpido cuando los chabolistas de Carabanchel gritaron desde la tribuna pública su derecho a una vivienda. Con un «por favor, retiren a todas esas personas», pronunciado con sonrisas por José Luis Alvarez, los concejales volvían a dar su monótono aprobado a todos los puntos previstos del orden del día. Los alcaldables presenciaron entre sonrisas y bostezos el desarrollo de la sesión.

El pleno se inició con una moción de la alcaldía por la que se pedía una pensión extraordinaria a cargo de la Corporación para la viuda de Benjamín Díez, el policía munici pal asesinado el pasado día 22. El señor Alvarez tuvo unas emotivas palabras para el policía fallecido y toda la Corporación aprobó la moción.Concesión de medalla

El segundo punto era otra moción de la alcaldía para proponer la concesión de la medalla de Madrid a Juan Sampelayo, cronista municipal. Ezequiel Puig Maestro Amado fue el encargado de explicar y ensalzar el trabajo realizado durante largos años por el señor Sampelayo.

Luego se aprobaron una serie de puntos relativos al cambio de nombre de la Policía Municipal Femenina -ahora se llamará Escala Femenina de la Policía Municipal-, dos dictámenes encaminados a promocionar al personal especializado de los funcionarios municipales, la reorganización de la circulación y transportes. El aprobado de los concejales seguía siste máticam ente a cada propuesta. Los representantes de los partidos políticos bostezaban sin reparo ante la marcha de la sesión. Ramón Tamames (PCE), Francisca Sauquillo (ORT), Alonso Puerta (PSOE), Siso García Vázquez (MC), Pablo Mayoral Rueda (PCE m-l), Joaquín Aramburu e incluso Herrero de Miñón (UCD) no podían disimular su aburrimiento.

Al llegar a las propuestas elaboradas por la comisión de obras y servicios, la sesión salió un poco de su letargo. Se aprobó el proyecto de restauración general de cubiertas en las viviendas municipales del barrio VI de Moratalaz, por importe de 66.223.072 pesetas. Se aceptó provisionalmente el plan parcial de la zona industrial de Barajas en el distrito de San Blas, y se aprobó que por Coplaco se proceda a la formulación y tramitación de la modificación de la reforma del plan parcial del Poblado Dirigido de Orcasitas.

Paraguas y pancarta

La intervención de los vecinos de Carabanchel se produjo cuando el secretario leyó la propuesta de informar favorablemente al Area Metropolitana de la modificación del plan general en el sector de Pan Bendito de Carabanchel. Dos grandes paraguas negros con peticiones de viviendas pintadas en blanco y una gran pancarta recogían las exigencias de los vecinos de Carabanchel que, puestos en pie, ocupaban las tres últimas filas de la tribuna pública. «¡Retiren a todas esas personas! », gritó por dos veces el alcalde, quien sonreía suavemente según veía que la sala quedaba semidesierta. No hubo más conflictos en toda la sesión.

Finalmente, se aprobó convocar a concurso las obras de los seis primeros bloques de lo que será el Plan de Saneamiento Integral. José Luis Alvarez manifestó que este punto suponía la puesta enmarcha de un plan que en el plazo de cuatro años significaría un cambio radical de lo que son actualmente las condiciones higiénicas y sanitarias de la ciudad.

En el capítulo de ruegos y preguntas, el concejal Antonio Horcajo pidió que fueran reconocidos los derechos históricos y autonomía económica de Madrid, mientras que Julio Llantada se refirió a la agresión estética que supone la instalación de acondicionadores de aire en las fachadas.