"Gastamos miles de millones en medicamentos que no sirven para nada"

«Estamos gastando miles de millones de pesetas en medicamentos que no sirven para nada», ha declarado a la agencia Efe el profesor Alberto Sols, director del Instituto de Enzimología de la Universidad Autónoma de Madrid.El profesor Sols, figura eminente de la investigación en enzimología, ha realizado últimamente una investigación de enorme interés práctico y gran actualidad: la falta de rigor científico de algunos preparados farmacéuticos que se venden en España. Su trabajo está destinado a descubrir los mitos, fraudes y realidades de los coenzimas en terapéutica. Los coenzimas son vitales para la mayoría de los enzimas. Uno de los más importantes, el ATP, está considerado como «la moneda energética universal, gracias a la cual, la célula tiene energía suficiente para realizar sus miles de reacciones, químicas».

«A medida que se van descubriendo esas piezas fundamentales que forman el entramado de la vida -añade el profesor Sols- hay casas farmacéuticas que creen, algunas de buena fe, otras quizá no tanto, que, cuando alguna, cosa anda mal basta con facilitar, desde fuera, lo que no funciona para que todo mejore. Lo que ocurre, simplemente, es que estas piezas, cada célula las hace por sí mismas y no pueden entrar ni salir de ellas.»

Continúa el profesor Sols afirmando que «es una pena que al socaire del progreso de la ciencia que nos permite descubrir cada una de las piezas de que se compone el ser vivo, algunas casas farmacéuticas vengan diciendo que hay una medicina maravillosa que contiene una pieza muy útil, con lo que se está produciendo un engaño al médico y al propio enfermo».

«El ATP -prosigue- es uno de los coenzimas que se receta más o que hay más en el comercio. En el año 1977 había cuarenta preparados y en este año de 1978 son ya 62. El negocio va creciendo a base de una cosa que no sirve para nada. Cada diez gramos de carne, por ejemplo, tienen una cantidad de ATP igual a la que se recomienda en estos medicamentos, y diez gramos de carne son literalmente un bocado. De tal forma es esto así que estos preparados no son permitidos en ningún país desarrollado.»

Respecto a las vitaminas, el profesor Sols asegura que «de suyo, son buenas, pero la mayor parte de las veces no nos hacen falta porque ya comemos bastante. Necesitamos una cierta cantidad que, una vez cubierta, se elimina por la orina. Las vitaminas nunca escasean cuando se come una comida muy variada.