Exodo blanco de Rodesia
El Gobierno rodesiano anunció ayer que durante el mes de noviembre abandonaron el país 1.834 blancos, cifra récord sin precedentes para un solo mes, con lo que el número de emigrantes blancos durante los once primeros meses del presente año superan el total registrado en 1977.
Estas cifras publicadas en el resumen mensual de estadísticas gubernamentales indican el grave desgaste de la confianza blanca en el futuro de Rodesia -escenario actual de una escalada de guerra de guerrillas que no presenta signos inmediatos de acuerdo pacífico hacia un Gobierno de mayoría.
El empeoramiento de la tendencia a la emigración ha disparado el timbre de alarma en las oficinas gubernamentales, dado que los blancos son responsables del funcionamiento de servicios vitales y, aun más significativamente, son los principales componentes de la masa de reservistas de las fuerzas armadas.
El primer ministro, Ian Smith, lanzó llamamientos frecuentes a la minoría blanca a que le den la oportunidad de conseguir un acuerdo antes de abandonar su cargo, llamamiento que refleja los temores de que la guerra contra los guerrilleros del Frente Patriótico pudiera perderse a causa de la emigración blanca.
Las cifras gubernamentales disponibles demuestran que de los blancos perdidos a la emigración entre enero y agosto, 2.600 eran hombres en edad de combatir, o sea, entre los dieciocho y los cincuenta años.
Según el último resumen, en noviembre llegaron a Rodesia 223 blancos y emigraron 2.057, arrojando así una balanza negativa de 1.834. Esta cifra supera el récord registrado en diciembre de 1963, cuando abandonaron el país 1.634 blancos.
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