Francia, contrario habitual de España en partidos amistosos

La selección española, que llegó ayer tarde a la Ciudad Luz, jugará mañana en el histórico Parque de los Príncipes su decimoséptimo encuentro internacional futbolístico contra Francia. Curiosamente, tanto los anteriores como el próximo a celebrarse, habrán sido amistosos. Nunca ambas selecciones se han encontrado en torneos oficiales a nivel de campeonatos de Europa o del Mundo. En el último de Argentina, precisamente, fueron eliminadas en la primera ronda, por separado y dejando bien distinta impresión: buena la francesa, mala la española. España jugará el próximo día 15, en Valencia, contra Rumania, dentro del grupo III de la Eurocopa, mientras Francia, que se encuentra en el V, y en peor forma que la «argentina», por sus muchas bajas, sólo recibirá a Luxemburgo el 25 de febrero de 1979.

Pese a que Francia parece encontrarse en malas horas futbolísticas, la esperanza de que España juegue mañana, por fin verdadero, un partido de entrenamiento, sin pensar en la típica «prima», cabe aún. Las variantes respecto al equipo que venció en Zagreb a Yugoslavia no pueden ser muchas, salvo por las incorporaciones a última hora de Rojo I y, Escalza, a juzgar por la lista dada por Kubala. Por otra parte, la posibilidad en esta ocasión de que se realicen cuatro cambios durante el partido para probar otros jugadores -aunque casi no los haya-, quita más importancia aún a esa alineación inicial. Realmente de lo que se trata por una vez es de ver ideas nuevas, fútbol suelto, a una selección que en tantas ocasiones se ha agarrotado.La posibilidad de una formación con Miguel Angel; Marcelino, Migueli, Olmo, Escalza (sustituto del lesionado Cundi); Villar, Del Bosque, Asensi; Rojo I o Leal, Juanito y Santillana, no puede, por tanto, andar muy descaminada. Para suplir a Olmo estaría Alesanco, y tanto Arconada, Solsona como Rubén Cano pueden tener sitio en la portería, en medio y delante, en cualquier momento, incluso inicialmente. La presencia de Saura, menos contrastada aún que la de Sánchez, no parece permitirle un sitio entre los cuatro sustitutos. El problema que se vuelve a observar, al igual que contra Yugoslavia, es la osadía de Kubala al no contar con apenas defensas, máxime cuando Olmo ha estado recientemente muy tocado con un pellizco de menisco. Pero esta vez cabe perdonárselo por aquello de las pruebas en plan de amigos.

Muchas bajas

La duda ante el encuentro de mañana es si el equipo galo, diezmado por las lesiones, podrá ser la mejor piedra de toque que necesita actualmente España. La mala suerte, por lo que se ve, persigue a nuestro fútbol en los partidos de entrenamiento. Cuando el error no viene claramente de la Federación, que programa partidos lamentables, como los pasados de Noruega, México y Uruguay, antes del Mundial de Argentina, los imponderables aparecen. En realidad nadie podía poner reparos hace unos meses al equipo francés, que tan brillantemente llegó a Argentina y dejó una impresión inmejorable, pese a no clasificarse. Pero hoy, quizá como reflejo de la desilusión mundialista, Francia está en horas bajas.

Aquel equipo que perdió sólo por 2-1 ante Italia -el mejor fútbol de la primera fase- en el partido inaugural de Mar del Plata; que no mereció caer ante Argentina por otro 2-1, tras encajar un primer gol de penalti injusto y que derrotó con facilidad, por 3-1, a Hungría en el intrascendente partido de «eliminados», dejó una huella bien distinta a la de España en su paso por el Mundial. Ahora, sin embargo, hace tiempo que Francia perdió a Platini, su «cerebro», gravemente lesionado y aún en recuperación. También ha debido prescindir de su capitán y defensa libre de color, Trésor, considerado como uno de los mejores jugadores del mundo en su puesto, que incluso jugó el pasado partido de la Eurocopa en Luxemburgo y marcó un gol. Otro de los ausentes contra España por lesión y básico desde Argentina, será el delantero centro Lacombe, autor, pese a su baja estatura, del gol relámpago y de tiralíneas marcado a Italia en Mar del Plata, tras una internada de Six. Por último, Michel Hidalgo, el seleccionador galo, tampoco ha convocado, por encontrarse en baja forma, al lateral izquierdo Bossis, jugador de mucha estatura, pero rápido y seguro, que se suma al ataque con facilidad.

Ante estas bajas el bloque del Estrasburgo, equipo revelación de la Liga actual, en la que marcha líder destacado, será la base de la selección. El cuadro alsaciano, que militaba aún hace dos años en Segunda División, fue ya tercero de Primera la pasada temporada, tras el ascenso, y actualmente es el único representante que le ha quedado al fútbol francés -otro síntoma de sus horas bajas-, en las competiciones europeas. El Estrasburgo eliminó, el último miércoles, en dieciséisavos de final de la Copa de la UEFA al Hibernian escocés, y ahora se encontrará en octavos con el Duisburgo alemán federal. Quiere seguir el camino europeo importante que sólo en su país cumplieron con anterioridad Stade de Reims -último ahora en la Liga- y los «verdes» del Saint Etienne. El guardameta Dropsy -magnífico en Edimburgo, al parecer-; el libero Specht -sustituto de Trésor-; el centrocampista Piasecki y el goleador revelación Gemnirich parecen seguros en el equipo inicial. También podría sumarse el lateral izquierdo Marx, con lo que jugarían los seis convocados del equipo. Los otros dos laterales con posibilidad de alinearse son los «mundialistas» Battiston (Metz) y Janvion (St. Etienne), mientras el central debe ser otro fijo de los «verdes», con apellido español, López.

En la única línea donde Hidalgo no tendrá problemas será en la delantera, pues lesionado Lacombe parecen fijos Rocheteau (otro St. Etienne), Gemmrich y Six (del Marsella, como Trésor). En el centro del campo, en cambio, la duda es mayor, pues el único con plaza asegurada y él cargo de capitán incluido tiende a ser el veterano Michel, solitario representante del Nantes, al que también pertenece Bossis. La lesión de Jouve, otro jugador del Estrasburgo, titular frente a Luxemburgo, quizá dé opción a la vuelta a la selección de Bathenay, que jugó en el Mundial contra Argentina y Hungría y al que Hidalgo quiere dar confianza tras su cambio de club, al París St. Germain. El «strasbourgois» Piasecki, como ha quedado dicho, puede tener otra plaza, pero también aspira a ella el monegasco Petit -que jugó frente a Hungría- o la novedad de Simon, figura del Lille, clasificado en la primera mitad de la Liga. Entre los dieciete convocados para jugar contra España nueve estuvieron en Argentina: Dropsy, Battiston, Janvion, López, Bathenay, Petit, Michel, Rocheteau y Six.

Historial

España y Francia han jugado hasta ahora dieciséis encuentros a nivel de selecciones A. El balance es netamente favorable a España, con nueve victorias: 30 de abril de 1922 (Burdeos) Francia, 0; España, 4. 28 de enero de 1923 (San Sebastián) España, 3; Francia, 0. 22 de mayo de 1927 (París) Francia, 1; España, 4. 14 de abril de 1929 (Zaragoza) España, 8; Francia, 1. 24 de enero de 1935 (Madrid) España, 2; Francia, 0. 15 de marzo de 1942 (Sevilla) España, 4; Francia, 0. 19 de junio de 1949 (París) Francia, 1; España, 5. 2 de abril de 1961 (Madrid) España, 2; Francia, 0. 17 de octubre de 1968 (Lyon) Francia, 1; España, 3.

Francia se impuso en sólo tres ocasiones: 23 de abril de 1933 (París) Francia, 1; España, 0. 17 de marzo de 1955 (Madrid) España, 1; Francia, 2, y 17 de diciembre de 1959 (París) Francia, 4; España, 3.

Los empates, en su mayoría recientes, han sido cuatro: 13 de marzo de 1958 (París), Francia, 2; España, 2 -en este partido, precisamente, marcó Kubala un gol-. 10 de diciembre de 1961 (París) Francia, 1; España, 1. 9 de enero de 1963 (Barcelona) España, 0; Francia, 0. Y 17 de marzo de 1971 (Valencia) España, 2; Francia, 2. La alineación de este último encuentro, ya en la «era» de Kubala -seleccionador- fue: Iríbar; Sol, Gallego, Antón; Costas (Lora), Tonono; Amancio (Rexach), Pirri, Arieta II (Quini), Claramunt y Churruca. Pirri marcó los dos goles espectacularmente después de ir perdiendo España por 0-2.