Porta insulta desde Zagreb
Pablo Porta ha necesitado irse a Zagreb para insultarme. En este país siempre ha sido costumbre caballerosa decirse las cosas en la cara. Me disgustaría que don Pablo sintiera necesidad de llamarme algo más insultante que cretino, porque para ello tendría que recurrir a viajar, sin ir más lejos, hasta Auckland, y no me agradaría que mi amigo José María García se diera esa paliza por defenderme.No me ha causado grave disgusto el que don Pablo se haya enfadado conmigo. Me considero afortunado. Peor lo hubiera pasado en los gloriosos cuarenta de haber sido condiscípulo suyo en la facultad de Derecho de Barcelona, cuando él era cosa en el SEU.
Pablo Porta asegura que Saporta preside el Mundial-82 porque él lo propuso. Acepto que Porta considere a Saporta el hombre idóneo. No es este el tema. La discusión estaba en el fondo de la cuestión. Para mí sólo podía existir un comité organizador nombrado por el Gobierno. Para Porta sólo existía su autoridad. Porta nombró presidente de la comisión a José Ángel Zalba, ex presidente del Zaragoza, y fue este el nombre que presentó ante la FIFA. Zalba desapareció del tema tras una desafortunada visita al ministro de Cultura. Porta se autonombró sucesor de Zalba y el Boletín Oficial del Estado ha designado a Saporta.
Lo que ha publicado el BOE está bien claro; la Federación de Fútbol es un miembro más de la organización del campeonato y no el más importante. Saporta, para su nombramiento, ni siquiera necesitaba el consenso de Porta; lo tenía mucho más arriba. Prou.
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