_
_
_
_
_
Asamblea anual del Fondo Monetario Internacional

El FMI reitera su diagnóstico pesimista sobre la economía mundial

La inflación, el lento ritmo de recuperación de las economías mundiales y los desajustes de las balanzas de pagos han sido los tres problemas destacados por el director gerente del Fondo Monetario Internacional, Jacques Larosiere, en el curso de su intervención ayer en la apertura de la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington.

En su informe ante la asamblea del Fondo, el director gerente ha señalado, que los problemas de la economía mundial son graves y complejos, que requerirán un largo período de saneamiento y que las medidas más idóneas para solucionarlos habrán de consistir en una mayor convergencia de las tasas de crecimiento en torno a un nivel medio más elevado, un mayor éxito en la lucha contra la inflación, una mayor estabilidad en los mercados de cambios, y el fortalecimiento de las economías de los países en desarrollo.El director del Fondo señaló que a escala internacional, hay una subutilización considerable de los recursos económicos, incluido un alto nivel de desempleo. «Una de las consecuencias especialmente graves h a sido causa de que el volumen del comercio mundial haya aumentado solamente a una tasa del 4 al 5% al año en el período reciente, lo que contrasta con la tasa media anual del 9% registrada durante el decenio de 1960 y comienzos de los años setenta. En este ambiente poco satisfactorio se ha ido extendiendo un creciente proteccionismo comercial, hecho que considero uno de los más perturbadores de la escena económica mundial.»

En cuanto a los desequilibrios exteriores, el director gerente del FMI criticó tanto la actitud de Estados Unidos como la de alemanes, japoneses y suizos. Las divergentes tasas de crecimiento interior de estos dos grupos de países han desembocado en situaciones diametralmente opuestas en cuanto a la situación de sus balanzas de pagos en cuenta corriente, ya que mientras Estados Unidos tiene un déficit muy elevado, los otros tres países mantienen un superávit que será en 1978 muy superior a los de los principales países exportadores de petróleo, estimado actualmente en unos 50.000 millones de dólares. En definitiva, el proceso internacional de ajuste se está realizando, en opinión del director del FMI, de forma «poco satisfactoria».

Estos desajustes han creado serias dificultades en las políticas cambiarlas y los mercados de divisas han experimentado oscilaciones demasiado fuertes para que sean compatibles con un clima de mayor estabilidad internacional. La reciente caída del dólar es una de las manifestaciones más claras del fracaso de este proceso de ajuste internacional.

Larosiere dijo también que es necesario hacer mayor hincapié en las políticas para estimular el crecimiento económico, pero siempre sin perturbar la lucha contra la inflación, y ajustando mejor sus balanzas de pagos, en donde los balances positivos y negativos son igualmente indeseables.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_