Los empresanos occidentales quieren reforzar la OTAN

El general Hunt, miembro del Instituto de Estudios Estratégicos de Londres, declaró ayer en una reunión de las grandes empresasprivadas de los quince países miembros de la OTAN que la disuasión «debe comenzar en las mismas fronteras entre los dos bloques».«La URSS respeta la fuerza»; dijo en Hamburgo, donde tiene lugar la reunión, el ex primer ministro holandés Biesheuvel. Los delegados han coincidido también en que se precisan más maniobras en el corazón de Europa occidental y la ampliación de la OTAN a otros países no integrados en la Alianza, como Suráfrica, o zonas como) Oriente Próximo o el Asia y el Asía. monzónica, aparte de países europeos no vinculados a la OTAN.

Esta conferencia de grandes empresarios occidentales que ven sus intereses estrechamente unidos a la potenciación de la alianza occidental ha coincidido con unas controvertidas maniobras de la misma Alianza en suelo alemán. Aparte del número de víctimas ocasionado entre personal civil y militar durante el desarrollo del ejercicio -quince muertos en dos días- se ha registrado una intensa confrontación entre el ministro de Defensa federal, Apel, y su portavoz oficial, Buelow. Este había atribuido a su jefe el haber calificado las actuales maniobras de la OTAN en suelo alemán de «inútiles e inoportunas» y el constituir «un peligro para la distensión». Appl, el primer ministro de Defensa alemán que ni siquiera hizo el servicio militar, se ha visto obligado a puntualizar que las declaraciones de su portavoz no se ajustan a la realidad.

En definitiva, la RFA es un país miembrode la OTAN y no hay razones para rehusar el que su terrítorio sea escenario de un ejercicio táctico conjunto. La posición de Apel y unas declaraciones anteriores tímidamente neutralistas del encargado de negocios de la socicialdemocracia, Egon Bahr, han motivado el que la Democracia Cristiana se rasgue las vestiduras acusando al Gobierno de buscar un abandono de la OTAN y que al fin, tras hablarse de números en el Parlamento, el debate presupuestario haya concluido con una reafirmación de fe atlantista a cargo de los cuatro partidos del Bundestag. El clima mílitar,se caldea en Alemania y ya se apunta hacia la posibilidad de introducir el servicio militar femenino y de abandonar los vestigios del «ciudadano de uniforme» con que trató de carac terizar al militar de carrera.