Reconstrucción acústica del asesinato de John Kennedy
El eco de los disparos retumbó nuevamente el pasado domingo en la plaza Dealey, de Dallas (Texas), el mismo lugar donde cayó asesinado hace quince años el presidente John F. Kennedy. En esta ocasión, sin embargo, el blanco era un montón de sacos terreros y el francotirador, un policía uniformado.La «reconstrucción» del asesinato de Kennedy se hizo al amanecer del domingo, por orden de un comité especial de la Cámara de Representantes que desde hace dos años viene investigando las circunstancias del magnicidio de Dallas. El motivo de la prueba era recoger en una cinta magnetofónica los estampidos de los disparos y compararla con una que se gravó involuntariamente en el mismo momento del crimen.
Según expertos en acústica que estudiaron la cinta magnetofónica grabada el 22 de noviembre de 1963 en la plaza Dealey por el micrófono de la radio de un policía motorizado de Dallas, que lo había dejado inadvertidamente abierto, en la grabación pueden percibirse los estampidos de cuatro disparos, quizá más, lo que contradice la versión oficial del magnicidio recogida por el informe Warren.
Diez meses después del asesinato de Kennedy, la comisión Warren hizo público su polémico informe, en el que se señalaba que Lee Harvey Oswald actuó solo y que hizo tres disparos. De confirmarse que hubo un cuarto disparo tomaría cuerpo la hipótesis de que existió un segundo francotirador
El cuarto disparo
El motivo por el que se ha tardado quince años en advertir que en la cinta magnetofónica se había impresionado el ruido de más de tres tiros no está suficientemente claro, pero parece ser que hasta hace muy poco tiempo no existía la moderna tecnología acústica que permitiera a los especialistas «descomponer» los sonidos impresos en la cinta.Una pila de sacos terreros fue erigida en el lugar aproximado donde estaba el coche de Kennedy cuando se disparó contra él. Un policía de Dallas, armado con un rifle idéntico al que fue encontrado en el lugar del crimen, disparó varios tiros desde la ventana del sexto piso del depósito de libros de la Texas School.
Después de varias pruebas, efectuadas ante unos 200 curiosos, se oyó otro disparo, proveniente de una loma cercana. Más tarde se confirmó que otro policía había disparado desde allí con un revólver del calibre 38, pero los portavoces oficiales no informaron sobre la finalidad de esta segunda prueba.
Sin embargo, las hipótesis de conspiración coincidían en afirmar que el segundo francotirador estuvo apostado en esa misma loma. El revólver empleado en la prueba era idéntico al utilizado por Jack Ruby para asesinar a Oswald, el 24 de noviembre de 1963.
La empresa especializada en acústica que realizó las pruebas en la plaza Dealey es la misma que se encargó de investigar la famosa «desaparición» de 18 minutos de grabación en las cintas del caso Watergate.
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