La oposición no desautoriza el programa económico de Andreotti

Los partidos políticos italianos de la mayoría han acogido favorablemente las líneas generales del plan económico para el próximo trienio expuesto por el Gobierno. El conjunto de medidas que se aconsejan serán debatidas hásta la primera semana de septiembre cuando se consultará a las fuerzas sociales, principalmente a los sindicatos. El plan tiene por objetivo vigorizar la economía italiana e implantar las correcciones necesarias para alinearse con la política económica europea. Los comunistas no han hecho consideraciones específicas sobre el plan, pero reconocen que fue elaborado con seriedad y coincide con la estrategia económica establecida en la plataforma política sobre la cual se constituyeron la actual mayoría y el actual Gobierno. Agregan que ahora resta cumplir con la exigencia de presentar un programa convincente en todos sus aspectos y en forma especial en aquellas partes relativas al desarrollo de las inversiones, al empleo y a las regiones meridionales menos desarrolladas. También requieren que el plan refleje una voluntad de moralización, dejusticia y de reformas.

Para los portavoces socialistas, el plan debe unir estrechamente una acción de contención del gasto público y del costo del trabajo con la reanudación de las inversiones y, en consecuencia, un cambio de las tendencias en el área del empleo. Consideran necesario que los lineamientos de política económica obtengan un amplio consenso social, considerado como requisito ésencial para sus posibilidades de éxito.

En términos semejantes se han pronunciado los socialdemócratas y los republicanos, mientras que los liberales expresaron un juicio negativo.

Durante el debate del tema económico no han influido negativamente las crecientes tensiones entre comunistas y socialistas reveladas en las últimas jornadas en el plano político. Ha contribuido hasta ahora al mantenimiento de ese clima la circunstancia de que el presidente del Consejo de Minístros, Giulio Andreotti, se limitó a exponer las líneas generales del plan económico.