La CEE, en el horizonte de los partidos socialistas de España, y Portugal

Además de la «cumbre socialista» de Badajoz, dos ministros de Gobierno y el presidente del Senado acudieron el pasado fin de semana a Badajoz, con el fin de asistir a una asamblea de UCD; mientras tanto, Raimundo Fernández-Cuesta daba un mitin en la localidad de Don Benito, y Manuel Fraga hacía lo propio en la vecina Cáceres. No se recuerda otra concentración política más numerosa en Badajoz.

A primeras horas de la tarde del domingo, los partidos socialistas de Portugal y España dieron por finalizadas las reuniones de trabajo que desarrollaron durante el fin de semana en Badajoz, en lo que se llamó «cumbre socialista hispano-portuguesa». Al término de ellas, el secretario del PSOE, Felipe González, señaló, en una rueda de prensa, la importancia de las conversaciones mantenidas, por el carácter simbólico -y no sólo material- de esta «cumbre».Mario Soares, por su parte, hizo hincapié en el ambiente de fraternidad que había imperado en las reuniones y la convergencia en los temas que se estudiaron.

Tras este prólogo, Gómez Llorente dio lectura a un comunicado en el que se hace hincapié en el interés de los dos partidos socialistas en la cooperación mutua en todos los aspectos.

Integración en la CEE

La integración de Portugal y España en la Comunidad Económica Europea, fin que ambos partidos persiguen, fue un tema ampliamente debatido. Los socialistas portugueses se mostraron satisfechos por la reciente decisión del Consejo de Ministros de la CEE de iniciar las conversaciones con Portugal para el próximo otoño, al tiempo que manifestaron su deseo de que se adopte una decisión similar con respecto a España.

También dijeron que la ampliación de la Comunidad reforzará la perspectiva de una verdadera «aurora» para los trabajadores. En este sentido, ambos partidos mostraron gran interés en la intensificación de relaciones económicas, cultura es y de cooperación tecnológica entre España y Portugal, en la perspectiva de una próxima adhesión a la Comunidad Europea.

La situación en América latina también fue objeto de análisis. En este punto, los partidos socialistas señalaron que existen unas condiciones adecuadas para una mutación pacífica y democrática.

Tras la lectura del comunicado comenzó la rueda de prensa, en la que el secretario general del PSOE sintetizó los temas tratados en la «cumbre» diciendo que se había expuesto la política internacional del PSOE. Con respecto a la OTAN dijo que la incorporación de España al tratado no reportaría beneficio alguno y es una modificación delicada de la actual situación de España en el plano internacional.

Con respecto al «socialismo ibérico», se declaró partidario, siempre que se entienda que no es un solo socialismo, sino dos esfuerzos para construir una alternativa socialista democrática en dos países que tienen personalidad propia.

Ante casi 5.000 personas, los socialistas portugueses y españoles celebraron un mitin en el auditorio municipal, el pasado sábado, en el que intervinieron Luis Yáñez, Mario Soares, Tierno Galván y Luis Gómez Llorente.

Luis Yáñez manifestó durante su intervención que el presidente de la preautonomía extremeña debe ser Hernández Gil, dado su prestigio por encima de los partidos políticos.

Tierno Galván se refirió a la democracia, en la que -dijo- creían todos, y que los democristianos y revolucionarios no son, en absoluto, pesimistas ni abdican de nada. Luis Gómez Llorente enfocó su discurso sobre la Constitución en el sentido de que no es de claro signo socialista, pero hará posible construir una libertad en la democracia.

A continuación intervino Mario Soares, quien hizo votos por la solidaridad y amistad entre los partidos socialistas de Portugal y España y por la de ambos pueblos. Recordó los días de Franco y Salazar y aludió a la tristemente célebre plaza de toros de Badajoz, donde murieron muchos pacenses, pidiendo perdón por los portugueses que intervinieron en esas muertes.

Cerró el acto Felipe González, quien habló de la internacionalidad del socialismo y se mostró esperanzado porque muy pronto «vamos a gobernar», ya que, según dijo, cuenta con el apoyo del pueblo. Sin embargo, este optimismo se ensombrenció cuando hizo referencia al millón de votos que le hacen falta para gobernar.