Apatía y recortes
Semana tan apática como las precedentes, con la única diferencia de que se ha acentuado la debilidad (el índice general capitalino pierde 1,56 puntos).El retraimiento del dinero ha sido más patente y la oferta, tampoco abundante, ha seguido presionando, con el correspondiente reflejo en los índices y en las cotizaciones. Desde la tercera semana de mayo se ha ido produciendo un debilitamiento suave, pero continuado, cuyo fin no se acierta a prever. Los mas optimistas hablaban de una próxima reacción, pero ya veremos cuándo y cómo cristaliza.
El hecho es que, día a día, la semana a ido a peor, resultando las jornadas del jueves y viernes las más vendedoras. Pero como se está operando con volúmenes escasos, el descenso no es muy significativo y, en cualquier momento, se puede -y casi diríamos que debe- producir una recuperación.
El sector más afectado por la oferta ha sido el eléctrico, precisamente el que en la tanda anterior había pegado un notable tirón. En conjunto pierde más de tres puntos su índice parcial, debido principalmente a las bajas de «las grandes». Además, la irrupción precipitada de la ampliación de Fecsa también ha incidido en el repliegue.
Otros grupos muy castigados fueron los típicamente industriales, es decir, Minero-siderúrgicas
Químicas. con sus títulos-estrellas (en tiempos, se entiende) al frente de la baja.
Mayor resistencia en el departamento bancario, aunque este sostenimiento les está costando dinero a los respectivos grupos. Pero, en fin, la imagen es la imagen, y ahora que vendrá la banca extranjera algunos viejos banqueros estiman que hay que aguantar el tipo.
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