El teniente general Gutiérrez Mellado, glosa la festividad de las Fuerzas Armadas

El ministro de Defensa, teniente general Manuel Gutiérrez Mellado, concedió ayer unas declaraciones a TVE, transmitidas tras el Telediario de la noche, en las que glosó el significado del Día de las Fuerzas Armadas y del homenaje a la bandera, y se refirió a las nuevas ordenanzas militares y a las necesidades presupuestarias de las Fuerzas Armadas. También pidió repetidamente apoyo, comprensión y homenaje para todos los soldados españoles.

El teniente general Gutiérrez Mellado afirmó sobre el Día de las Fuerzas Armadas: «Se ha querido establecer una fiesta solemne, con carácter anual, en el cual fuera un homenaje a las Fuerzas Armadas, que, por otra parte, éstas devuelven a la nación. Como ideas principales se ha querido simbolizar en una sola fecha la mayor solemnidad, sin que ello suponga que desaparezcan aquellas otras fiestas militares tradicionales, como los patrones y patronas de los diferentes Ejércitos, Armas o Cuerpos, o aquellas otras de carácter tradicional, regional o local.»Respecto del desfile que tendrá lugar mañana domingo dijo: «En ,este desfile van a desfilar los soldados de España, la España eterna, y yo me atrevo a decir que es lo mejor de España, porque va a ser la juventud, no toda la juventud, indudablemente parte de esa juventud, pero encuadrada en los mandos de los tres Ejércitos. Lo más noble, por tanto, la esperanza de España.

Por otra parte, yo pediría que tanto los que lo vean directamente como los que lo van a presenciar desde sus hogares, piensen lo que simboliza este desfile. Verán ustedes unos soldados que van a marchar con la cabeza erguida, mirando al frente, que sólo la van a mover unos instantes para mirar a los ojos de su primer, del comandante general, de Su Majestad el Rey de España. A la voz de mando de sus oficiales y contestar con toda su alma al grito de ¡Viva España! que van a lanzar al aire esos mandos. Yo les pido para ellos un aplauso que estoy seguro que lo van a recibir con alegría, con orgullo, pero también con humildad.»

Al abordar el homenaje a la bandera afirmó que «va a ser un acto que millones de españoles creo que van a poder seguir en directo, e incluso luego en emisiones posteriores de la televisión. Va a ser en la plaza de la Armería; el homenaje a la bandera se va a realizar a través de las banderas de las unidades que van a desfilar, que van a pasar la noche en el palacio Real, entregadas por sus escoltas de las diferentes unidades, al regimiento de la guardia del Rey, que lo devolverá a la mañana siguiente para ocupar el puesto de formación. Va a ser un homenaje de toda la nación, puesto que entre estas autoridades que van a asistir estará representada toda la nación. Por último, habrá un toque de oración, que como usted sabe, pues es un homenaje a nuestros muertos, y yo creo que todos los buenos españoles sentirán un pequeño escalofrío al ver este acto, que yo creo que era absolutamente necesario y verdaderamente deseado por todos los buenos españoles».

Habló luego de las ordenanzas militares, y tras agradecer a la comisión que las ha redactado, su trabajo «durante meses, mañana, tarde y noche», dijo que pensaba que se ha conseguido «que se mantenga todo lo inmortal que tienen nuestras viejas ordenanzas, pero actualizándolas al momento actual». «Creo que está terminado el tema -prosiguió-, está a punto de entregarse al Gobierno, el cual decidirá el trámite normal que debe! darse a esta disposición,que yo considero de gran interés para las Fuerzas Armadas y, por tanto, para España.»

Al abordar el tema de los «valores materiales de las Fuerzas Armadas» destacó que «los militares siempre pedimos dinero, y yo creo que en este momento las Cortes, en diferentes contactos que hemos tenido con las Comisiones de Defensa, están dispuestas a ayudarnos en todo lo que sea necesario para la mayor eficacia de nuestras Fuerzas Armadas».

Finalmente, el teniente general Gutiérrez Mellado dijo, refiriéndose al pueblo español: «Yo les pediría un aplauso para esos soldados, aunque no lo oigan todos, no lo oigan todos los que lo hagan, puesto que estarán en sus hogares, pero ellos lo sentirán en sus corazones. Yo les pediría que sepan que son esos soldados que todo se lo merecen, por su sacrificio, por-su trabajo, por su instrucción y que son la representación más genuina de España, puesto que en esas filas figuran los jóvenes de España, sin distinción de ideas, de profesiones ni de orígenes. Y también me atrevo a decirles a ellos que acepten este saludo o este homenaje, este aplauso que yo estoy seguro que van a recibir con alegría, con orgullo, como digo, pero también con humildad.»