Brasil se perfila como favorito para el Mundial
Los encuentros de preparación de las selecciones que participarán en el Mundial alimenta el interés de los aficionados y sirven para perfilar a los favoritos de la competición. Los programas de entrenamiento varían mucho en intensidad de unas a otras selecciones -la española se encuentra entre las de más corto y defectuoso programa- y los resultados de las consideradas como favoritas están dando mucho que hablar. Mientras Brasil ha impresionado en su gira por Europa y Francia confirma que habrá que respetar a su joven equipo, Argentina, la RFA e Italia tienen a sus hinchas desesperados.
El programa de Brasil es todo un modelo: Coutinho, seleccionador, concentró desde primeros de marzo a veintidós jugadores, que se presentaban en Europa a últimos de ese mismo mes para realizar una ambiciosa gira. El equipo de Coutinho llegó con el prestigio que le daban los buenos resultados obtenidos en América, y en su reciente gira ha confirmado un gran poder en todas sus líneas. Comenzó con una derrota mínima en París, si bien gustó mucho su juego y la crítica francesa le consideró merecedor a la victoria Después ganó a la RFA, pese a estrellar dos tiros en los palos, y empató en Londres. Completó la gira con brillantes resultados ante equipos de club: 2-6 al campeón de Arabia Saudita, 0-2 al Inter de Milán y 0-3 al Atlético.De Brasil, más que la tradicional calidad técnica de sus jugadores -hábiles, rápidos, de potente disparo y con excelente concepción del fútbol de ataque-, ha impresionado la disciplina táctica y la solidez defensiva. Por primera vez ha mostrado un equipo que no sólo busca en el fútbol la diversión sino que se sacrifica, marca muy encima, entra duro y piensa en la seguridad de su puerta. La novedad ha desconcertado a todos sus rivales europeos y ha fortalecido su imagen como favorito.
Junto a Brasil, es de destacar el buen plano en que se ha mostrado Francia, que consiguió un empate en Italia -que pudo ser victoria- y la citada victoria sobre Brasil como resultados más llamativos. Además, ganó con claridad a Portugal. Le restan en su programa de preparación dos encuentros de menos fuste, contra Irán y Túnez, los dos parientes más pobres del Mundial. Los resultados de Francia adquieren especial mérito si se piensa que le han faltado algunos de sus más importantes titulares, que se habrán recuperado antes del comienzo del campeonato. Hungría, con un apretado y bien concebido programa de preparación y con una valiosa victoria sobre Checoslovaquia en Praga, también merece estar considerada entre las selecciones llamadas a imponer respeto.
Argentina, Italia y la RFA, tres de las selecciones consideradas a priori como favoritas, están produciendo desencanto tras desencanto a sus seguidores. En Argentina, Menotti, seleccionador, cada vez convence menos con sus teorías. Es un enamorado de la belleza del fútbol, de las virtudes clásicas del jugador suramericano -siempre más técnico que el europeo, pero menos disciplinado- y trata de llevar sus teorías al equipo nacional. Los resultados, pese a que Argentina está trabajando a fondo, quizá con el programa de preparación más intenso de todas las selecciones, defraudan. Menotti introduce cambios en el once titular de partido a partido sin ningún resultado y a estas alturas nadie en Argentina confía en que su selección alcance las semifinales, y se ve problemático incluso que supere la fase de grupo. Argentina, además, está incluida en un grupo fortísimo, con Francia, Italia y Hungría.
A los italianos tampoco les van bien las cosas: sendos empates ante Francia y ante una selección escocesa en la que faltaron los jugadores que militan en la Liga inglesa -los mejores- han hundido los ánimos. Mucho tendrá que mejorar el equipo italiano en los encuentros que le restan para recobrar la confianza de los aficionados. No obstante, la debilidad de Italia puede ser sólo aparente. El equipo italiano es irregular por tradición, y no presta, además, excesivo interés a los choques amistosos. El nivel de sus individualidades es bueno, y si el técnico Bearzot consigue disciplina entre sus hombres, tendrá un excelente equipo.
A quien le ruedan peor las cosas es a Schoen, seleccionador de la RFA, último campeón. Gerd Muller, Beckenbauer, Overath y Hoeness, posiblemente los cuatro mejores hombres de aquel equipo, ya no están en la selección y no tienen sustituto. Schoen sabe que su equipo, como campeón del mundo, está obligado a vencer a todos sus rivales. Como Menotti, ha confeccionado un exhaustivo plan de preparación; pero los resultados no convencen, y las dos últimas derrotas, ante Brasil, en casa, y ante Suecia, fuera, han llevado las críticas a su punto más alto. Crisis de confianza entre los jugadores y desorientación del propio Schoen son los grandes males de esta selección, de la que, pese a todo, aún se espera que dé una buena medida en Argentina.
España, mal programa
Por lo que respecta a España, de sobra es sabido que su programa de preparación es corto y que los enemigos -Noruega, México y Uruguay- no son de altos vuelos. España, sin duda, será de las selecciones que acudan al Mundial con menos garantías de ofrecer su mejor rendimiento posible, que ya, de por sí, no se adivina muy alto. Austria y Suecia, que junto con Brasil serán sus enemigos, se preparan mejor y esa ventaja podría ser decisiva a la hora de jugarse la clasificación.
