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Joven herida gravemente por dos perros de presa

María Monserrat Pardo, de veinticuatro años, tuvo que ser ingresada en la Clínica Puerta de Hierro, como consecuencia de las numerosas lesiones de gravedad que le causaron dos perros de presa, guardianes de una finca en la que la joven trabajaba como empleada de hogar.

Los hechos ocurrieron sobre las dos menos diez de la madrugada en un chalet del pasaje de Hoyos del Espino, cuando la joven regresaba a la vivienda. Dos mastines, que se encontraban en el jardín, se abalanzaron sobre la empleada y comenzaron a morderle, hecho ante el cual la joven comenzó a pedir socorro.Un guarda de una finca cercana que oyó los gritos efectuó un disparo al aire, pero esta medida no obtuvo ningún resultado. Tras varios minutos, una pareja de la Policía Armada, de servicio en las inmediaciones, acudió a la finca y disparó contra los perros, que murieron en el acto.

Trasladada a la citada clínica, María Monserrat fue ingresada e intervenida quirúrgicamente durante más de cuatro horas. Presentaba mordeduras en los hombros, región glútea, axilas e ingles, así como hematomas y arañazos, por arrastre, en tórax y abdomen; a todo ello unía un shock hipobolémico por pérdida de sangre.

Durante la operación de suturar las heridas, que eran muy amplias, fue necesario hacerle una transfusión de cinco litros de sangre.

A media tarde de ayer la joven se encontraba mejor, estaba consciente, aunque el pronóstico seguía siendo difícil de precisar, ya que, al parecer, padece un déficit muscular que podría causarle una inmovilidad parcial en brazos y piernas.

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