La visita de los universitarios a Suárez

Los universitarios que el pasado sábado nos hemos reunido con el presidente del Gobierno no salimos de nuestro asombro ante la información que EL PAÍS publicó sobre este encuentro. Dice que «los estudiantes que se entrevistaron con Suárez no representaban a los colegios mayores». ¡Naturalmente! Ni nunca lo hemos pretendido. Nosotros mismos, los estudiantes, hemos confeccionado una lista de asistentes en la que sólo hemos procurado que hubiese una representación por edades, por procedencias regionales y por carreras. Algunos directores de colegios mayores parece que añoran la representación orgánica. Allá ellos.Ustedes. evidentemente, quisieron buscar lo que se llama una «información diferenciada». Y para ir a Cádiz dan un rodeo por Oviedo: les preguntan a unos directores de colegios por los motivos de la entrevista. Los motivos de ésta son, señor director, que queriamos conocer directamente al presidente del Gobierno. Y punto. Lo único que podemos decirle es que estamos agradecidos a Suárez por este encuentro, que nos encanta pensar que los universitarios tenemos abierta la puerta de su residencia, y que no hay ningún «criterio oscuro» en la entrevista.

Por lo demás, cuando quieran conocer los criterios de elección, pregúntennos a quienes hemos pedido el encuentro; que no se pregunte a quienes no estuvieron allí. No sé qué les parecería a ustedes si preguntáramos al director de una fábrica de gaseosas con qué criterios selecciona el director de EL PAÍS los almuerzos con políticos, si es que los celebra.

Parece mentira que un periódico «serio» sólo destaque de tres horas y media del coloquio del presidente del Gobierno con 111 universitarios un comentario trivial relativo a la posible belleza del señor Suárez. Es posible que EL PAÍS siga pensando que las mujeres españolas, incluso las universitarias, son unas retrasadas mentales.