Fracasó la huelga de Correos
En un clima de absoluta confusión, con acusaciones y desmentidos entre la CSUT, otras cinco centrales y la dirección de Correos, tuvo lugar ayer la jornada de huelga -desconvocada a las pocas horas del inicio- prevista por la Confederación de Sindicatos Unitarios de Trabajadores. Según esta central se registraron paros y asambleas en Valladolid, Lérida, Jerez, Oviedo, Santander, La Coruña, Santiago, Vigo, Pontevedra, Tárragona y diecisiete de los 35 distritos postales de Madrid.
Frente a estas afirmaciones de la CSUT, representantes de la comisión negociadora estatal de Correos y Telégrafos, y de las centrales CCOO, USO, UGT, SU y Sindicato Libre, firmaron un comunicado, que entregaron a la prensa en una rueda celebrada a últimas horas de la tarde de ayer, en el que se da cuenta que la huelga afecto tan sólo -según ellos habían comprobado- a cuarenta trabajadores de Lérida, cincuenta de Valladolid y a unos trescientos trabajadores de seis distritos postales de Madrid. «Lo cual representa -dice la nota- un 0,6% sobre un total de 56.000 trabajadores y con una duración de dos horas.»A la hora y media de iniciarse la huelga, la dirección de la CSUT acordó desconvocarla tras una entrevista con el director general de Correos y Telégrafos. En esta entrevista, según afirmaciones de la CSUT desmentidas por la propia dirección general y por las restantes centrales, se formalizó el siguiente acuerdo: 1. La dirección general se compromete a defender el proyecto de reestructuración del servicio elaborado por las centrales sindicales. 2. El proyecto de reestructuración se enviará a las Cortes por el procedimiento de urgencia y entrará en vigor desde el momento que lo aprueben las Cortes. 3. La dirección general acepta que el proyecto sea sometido a referéndum de todo el personal antes de su envío a las Cortes, y 4. No habrá sanción alguna por los paros y anormalidades producidos ayer.
Ante este acuerdo, según la CSUT, se decidió desconvocar la huelga.
En la rueda de prensa, a la que no se dejó asistir a la CSUT a la vista de los informadores (hubo un pequeño forcejeo en la puerta de la sala), los representantes de las citadas centrales, además de informar sobre la extensión reducida de la huelga, afirmaron que «son totalmente falsas las negociaciones que manifiesta haber mantenido la CSUT con la dirección general. Tales ficticias negociaciones han sido utilizadas como coartada ante el fracaso de la convocatoria».
Los citados representantes dieron cuenta de la entrevista mantenida ayer por la mesa negociadora, organismo unitario de los trabajadores, con la dirección de Correos y un representante de la Dirección General de la Función Pública, el señor, Pérez. En esta reunión Función Pública ha expresado sus criterios sobre el estatuto del personal, y se han acordado para próximos días reuniones con el Departamento de Hacienda para que se traduzcan en dinero los citados criterios. De todo este proceso se dará cuenta al organismo unitario de los trabajadores y antes del día 15 se les entregará el texto ultimado para futuro Consejo de Ministros, y ellos consultarán con sus bases -sin efectuar necesariamente un referéndum- para comprobar si hay consenso de la plantilla al mismo.
Explicaron que, en realidad, sus pretensiones económicas se reducen a un trasvase de los complementos (de parte de ellos) al salario mínimo, para que constituya éste el 75 % de las percepciones y repercuta en las pagas extras y derechos pasivos. Que los límites del pacto de la Moncloa podrían evitarse al crearse nuevas categorías por ley en el nuevo estatuto. Acusaron nuevamente, por último, a la CSUT por haber decidido unilateralmente la huelga, y no desecharon la posibilidad de recurrir ellos mismos a actos de presión
La Dirección General también desmiente
La Dirección General de Correos, ante las noticias aparecidas en la prensa vespertina de ayer, facilitadas por la CSUT, hizo pública una nota en la que desmiente el que haya existido entre ambas «ningún acuerdo formal». La Dirección se limitó a recordar su postura, reiteradamente expresada a todas las centrales en conjunto, sobre el proyecto de reestructuración del servicio. La Dirección defiende -como ya dijo- el proyecto de reestructuración elaborado tras las consultas y negociaciones con los funcionarios, y en cuanto al envío a las Cortes, que menciona la CSUT, responde al acuerdo del Gobierno de 9 de diciembre pasado. Finalmente, se opone al referéndum, ya que se está consultando sobre el estatuto a los representantes de los trabajadores.
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