El Tribunal de Cuentas no debería depender del Ministerio de Hacienda

El Tribunal de Cuentas no debería ser adscrito al Ministerio de Hacienda, puesto que el enjuiciamiento de la responsabilidad contable y la fiscalización financiera contemplan de modo directo y preferente la actividad de este departamento, según dijo ayer el presidente de la Audiencia Nacional, Rafael Mendizábal, en la conferencia que pronunció en la sede del Tribunal sobre su independencia y su encuadramiento constitucional.El señor Mendizábal indicó que el Tribunal de Cuentas debería quedar encuadrado, y sólo a muy limitados efectos exclusivamente administrativos, a la Presidencia del Gobierno. El conferenciante pidió también la independencia del organismo judicial respecto a las Cortes, la Administración pública y el poder judicial, lo cual no significaría un aislamiento total ni la exclusión de las conexiones y la colaboración necesaria. Dijo también que hay razones prácticas que aconsejan la vinculación del tribunal al poder legislativo que, en definitiva, es el que enjuicia la actividad política del Gobierno. De hecho, el borrador constitucional establece que el Tribunal de Cuentas dependerá directamente de las Cortes.

El acto se celebró en la sede del Tribunal, con la asistencia de su presidente, Servando Fernández Victorio; el fiscal Manuel Bellver y otras personalidades, así como numeroso público, que abarrotaba el local. Presidía el ministro de Justicia, Landelino Lavilla, quien cerró el acto poniendo de manifiesto la responsabilidad de los contadores, así como su independencia, esencia de su función fiscalizadora. La sesión había sido abierta por el presidente del Tribunal, quien analizó el papel de éste, que pronto cumplirá setecientos años de existencia, conservando aún las características con las qué fue constituido.