Con Ansón vivíamos mejor

Creo haber contado en esta columna que la semana pasada vinieron los de la tele a grabarme un comentario cultural y les hablé de un libro sobre el Opus Dei. Tenía mis dudas sobre si lo iban a dar o no. Bueno, pues no lo dieron.Yo sé que Martín Ferrand Orosa y par ahí son esforzados luchadores contra su propia biografía, pero si la primera grabación se perdió, hay que volver a Freud y su teoría de que toda pérdida u olvido son cosas voluntarias. Se pierde lo que no quiere encontrar. La Segunda grabación no sé si se perdería o qué, pero mis controles me dicen que no salió. Yo es que no veo televisión. ¿Es que, recién nombrado nuevo director de la cosa, la cosa sigue igual? Con Ansón a mí sí que me daban. Con Ansón vivíamos mejor.

Creo que Rafael tiene un despacho con moqueta en la Moncloa, a la derecha de Suárez. Se comunican con los nudillos, a través de la pared, como los presos. Cuando Suárez no contesta, Ansón ya sabe que le duelen las muelas. Pero mediante este lenguaje de los nudillos en el tabique pueden ganar fácil las municipales entre los dos. Buenos son.

Voy a hacer una pintada en Prado del Rey quedigaeso: «Con Ansón vivíamos mejor. » Mis grabaciones no se perdían. Tampoco las daban, pero no se perdían. Ahora anda ya por ahí toda la lista de los desmanes televisivos, el watergate de los que cobran y no trabajan, tipo affaire, y unos dicen que no es para tanto, otros que hay quien gana más, y hasta hay el que impetra nuestra caridad alegando que tiene un tumor. A millón o medio millón mensual, puede ser el, tumor de oro. O sea que tiene colocada a su señora para redondear un piquillo. He recibido una carta que me trae el motorista, de un simpatizante del Opus, donde se me recuerda que Padre se escribe así con mayúscula, refiriéndose a Escrivá, naturalmente.

Bueno, algo se aprende siempre. Ya no doy el tiempo por perdido, ese tiempo que dediqué a hablar del Opus ante unas cámaras que a lo mejor no tenían ni cinta. El que haya tanto veto para el tema me hace pensar que la Obra está más vigente de lo que yo creía o esperaba. Menos mal, porque si encima de que la Constitución (en borrador) nos saca laicos, el Padre Escrivá nos dejase de su mano, esto iba a ser Sodoma y Gomorra, pero en vicioso.

Al mismo tiempo que se publican los supuestos escándalos financieros de la tele, Vilallonga nos cuenta cómo se hicieron unos chalets íniportantes, para telejecutivos, cerca de Prado del Rey, a bajo precio y con alguna mano de obra de TVE. Y sale la lista de posibles señores que van a ser rectores, asesores o consejeros del invento, desde los partidos políticos. Yo creo que si alguno de estos políticos se pone ético o ático y quiere cuentas claras, se le debe hacer un chalet entre Prado del Rey y Pozuelo, y que deje de dar el cante. Esa colonia residencial cercana y dependiente de Prado del Rey va siendo ya como un Gulag ideológico donde se confina a los que traen ideas nuevas a las seiscientas y pico líneas esas de la cosa. Mientras no me hagan a mí un chalet de esos no voy a parar de meterme con la Obra y con lo que haga falta. Es una ntojo de mi señora. O sea un capricho.

Lo cual que he estado mirando yo la lista de presuntos inculpados y me faltan algunos nombres de los que podría contar cosas. Lo que pasa es que uno es columnista y no delator. Anoche estaba yo cenando en La Fuencisla, hombre, y en esto que en la mesa de al lado don Rodolfo Martín Villa, tomando la ventrisca de la casa, que la hacen muy bien. A punto estuve de quejarme y decirle que no han dado lo mío. Con Ansón vivíamos mejor. Y no digamos con Franco.