_
_
_
_
_

Sa Carneiro volverá reforzado a la jefatura de un PSD más a la derecha

El consejo nacional del Partido Social Demócrata (PSD) ha reaccionado bajo el signo de la reconciliación y Sa Carneiro, volverá a la presidencia del mismo con poderes reforzados, y con «Iuz verde» para una oposición abierta, ya no sólo al Gobierno socialista, sino a la propia Constitución y al presidente de la República.

El regreso de Sa Carneiro no será, sin embargo, inmediato y deberá decidirse en un próximo congreso extraordinario del PSD. Entretanto, el segundo partido en votos del país será dirigido por una comisión permanente de diez miembros presidida por Sousa Franco, número 2 del partido y un fiel seguidor de Sa Carneiro.El general Pires Veloso, el «virrey del Norte», ha sido llamado a Lisboa por el jefe de Estado Mayor del ejército de tierra, y recibido la orden de abandonar inmediatamente el mando de esta región militar y de quedar a disposición del Estado Mayor en Lisboa, hasta el inicio, a principio del año que viene, del curso para oficiales superiores. El motivo invocado es evitar que la nueva manifestación anunciada en Oporto, para el día 19, por los partidarios de su permanencia al frente de las fuerzas militares del Norte «agrave aún más la degradación de la figura militar" del general, Pires Veloso.

La presidencia de la República ha sido el centro de una intensa actividad en las últimas 48 horas. El general Eanes ha recibido a los jefes de Estado Mayor, consejeros de la revolucion e importantes figuras políticas civiles, entre las cuales el primer ministro y el presidente del Centro Democrático Social (CDS), Freitas do Amaral.

Con «indignación» la presidencia de la República ha desmentido los rumores lanzados por dos diarios estatizados de Oporto y por la emisora católica Radio Renascenga, según los cuales estaría en preparación un «golpe constitucional» patrocinado por los «meloantunistas» y tendente a la instauración de una «junta militar».

«Un intento de 25 de noviembre, pero al revés». Con estas palabras el general Vasco Lourengo, comandante de la región militar de Lisboa y representante máximo de los «capitanes de abril» en el Consejo de la Revolución, ha calificado la situación, expresando así el punto de vista que prevalece en los círculos del poder civil y militar en Lisboa. Lourenço ha puesto en guardia contra la campaña de contrain formación que, según él, va a mantenerse durante algún tiempo. De momento, la situación está «controlada, pero no dominada».

Junto a las movilizaciones partidistas y militares, el tercer frente, tal vez el más importante, de la ofensiva de la derecha, lo constituyen las recientes posturas de las asociaciones patronales de la industria, del comercio y de agricultores (CIP, CPP, CAP), respectivamente.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Como condiciones previas al diálogo con el Gobierno y los sindicatos, en vista a un «pacto social», estas asociaciones han presentado reivindicaciones incompatibles con el régimen constitucional vigente. La CIP pide el desmantelamiento de la legislación laboral: derecho de huelga, despidos, vacaciones y atribuciones de las comisiones de trabajadores, y la revisión de las leyes delimitando los sectores público y nacionalizado y fijando las indemnizaciones a pagar a los accionistas de las empresas nacionalizadas.

La CAP, por su lado, no admite la más mínima negociación de las modalidades de aplicación de la nueva ley de reforma agraria, negociación prometida por el Gobierno al Partido Comunista y a los sindicatos de trabajadores agrícolas, y exige condiciones de créditos preferenciales. En fin, la CCP, donde predominan los intermediarios y mayoristas, se opone a las medidas reguladoras del comercio interno y externo y a las limitaciones de las importaciones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_