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"Los obispos del mundo acomodan su mensaje a esta nueva cultura"

«Los obispos del mundo se han dado cuenta de que, ante una nueva cultura, hace falta que se acomode el mensaje a esta nueva cultura», según afirmó el cardenal Enrique y Tarancón en una entrevista televisada en la segunda edición de Telediario de ayer, con ocasión de su regreso del Sínodo de obispos.

El cardenal Tarancón afirmó que «el Sínodo no ha encontrado todavía su camino propio: teológicamente está muy claro lo de la colegialidad episcopal, pero hace falta el encuadramiento político que no ha encontrado... Sin embargo, yo creo que este ha sido el mejor de los cuatro Sínodos celebrados. Se está, de alguna manera, renovando el método, yo creo que puede ser un gran instrumento para la Iglesia».

« La Iglesia asume una actitud de cambio ante la sociedad y se acomoda, recogiendo todo lo bueno que tenga este cambio social, en lo ideológico, en lopráctico, en lo artístico, en lo social, en el modo de vivir, en la sicología de los hombres... Debe asumirlo, porque, al fin y al cabo, debe formar a estos cristianos para que vivan su cristianismo en esas circunstancias y en este ambiente.»

«No hay una nueva moral —prosiguió el cardenal— si se refiere a los grandes principios morales. Hay una nueva moral si se refiere a la casuística porque al cambiar la sicología, al cambiar las circunstancias, los grandes principios no se aplican de la misma manera. Pero los grandes principios morales que emanan de la fe son los mismos.»

La pornografía, una explosión contra la censura anterior

Refiriéndose al tema erótico y pornográfico, el cardenal Tarancón dijo que «en esto influye mucho el modo de ser de la gente y la costumbre. Yo creo que ha sido una explosión ahora contra la censura, quizá un poco excesiva, de tiempos pasados. Y una vez represada, cuando salta, lo inunda todo. Sin embargo, creo que por el buen sentido del pueblo español pasará sola. Al fin y al cabo, se han de respetar la voluntad y la libertad de los hombres, pero con una moderación, porque hoy hemos sobrepasado en esto a muchas naciones. Yo no me escandalizo de nada —ya me han pasado muchos años, tengo mucha experiencia, he visto muchas cosas— pero queremos, sobre todo, ya que se ha hablado de los quioscos que sobre esta presentación que pueden ver niños, adolescentes, hemos de cuidar su alma y su conciencia. Otra cosa son las personas mayores, ellas tienen su responsabilidad.»

A la pregunta sobre cuál es la postura de la Iglesia ante temas que van a ser despenalizados legalmente, como el adulterio y el amancebamiento, el cardenal dijo que «la Iglesia no se mete en la legislación civil, tiene su propio campo». Pero respecto al aborto y el divorcio «me parece que es una cosa distinta —afirmó—. El aborto es va atentar contra la vida y la vida es sagrada. Respecto al divorcio, lo que hemos de recordar a los católicos es que los que se casan por la Iglesia saben que para la Iglesia el matrimonio es indisoluble.

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