Policías alemanes colaboran con los españoles en el registro de los aviones de Lufthansa

El Gobierno español accedió el pasado domingo a una petición del Gobierno de la República Federal de Alemania para que funcionarios de la compañía de aviación alemana Lufthansa colaboren con los servicios de seguridad españoles en la vigilancia y control de los vuelos de la citada compañía que despeguen de cualquier aeropuerto civil español.

El acuerdo se tomó al término de una reunión celebrada a las ocho de la mañana del pasado domingo en el despacho del ministro del Interior, y a la misma asistieron, por parte española, además del señor Martín Villa, el director general de Seguridad, el subsecretario de Aviación Civil y el director general de Aeropuertos; y por parte alemana, el ministro consejero de la embajada de la RFA en Madrid y dos funcionarios de la compañía Lufthansa.La petición alemana fue expresada formalmente al Gobierno español por el ministro de Transportes de la RFA y, aunque en principio sólo contemplaba los aeropuertos de Palma de Mallorca y Barcelona, el Gobierno español decidió extenderla a todo el territorio nacional. Según se decía en el telegrama recibido por Martín Villa, las medidas especiales solicitadas por el Gobierno de Bonn se deben al temor de posibles represalias por parte de comandos terroristas tras el asalto del Boeing 737 alemán en el aeropuerto de Mogadiscio, y con el fin de combatir el terrorismo internacional. El Gobierno federal alemán ha tomado igualmente medidas especiales de seguridad en todos los centros oficiales (embajadas, institutos, colegios) que mantiene en los principales países del mundo.

Medidas especiales durante diez días

Las medidas especiales acordadas el pasado domingo consisten en que funcionarios de la compañía Lufthansa podrán registrar a los pasajeros de sus aviones «a pie del aparato», y siempre en presencia de la Guardia Civil, según informó una de las personas asistentes a la aludida reunión, en tanto que la vigilancia y el control de los viajeros y sus equipajes dentro de los aeropuertos seguirá a cargo de los servicios de seguridad españoles.

La medida, sin precedente en la historia de la aviación civil española, contempla también la presencia de los funcionarios alemanes durante el control y registro de pasajeros y equipajes en las terminales de los aeropuertos, pero sin ninguna capacidad operativa. «Podrán estar al lado de los funcionarios españoles -precisó la misma fuente- y señalar a éstos a aquellas personas sospechosas, pero nunca intervenir directamente.» Los funcionarios alemanes vigilarán fundamentalmente la inspección de las maletas a pie de avión.

A este respecto, la policía federal alemana está Investigando la posibilidad de que las armas y explosivos que se utilizaron en el secuestro del Boeing 737 realizado durante el vuelo Palma-Francfurt no fuesen introducidas por los secuestradores que embarcaron en el aeropuerto español, sino que se hallasen ya en su interior.

Las medidas especiales acordadas tienen previsto un plazo inicial de diez o doce días.Según un despacho de la agencia Efe, fechado en Bonn, el Gobierno federal alemán había amenazado con prohibir el aterrizaje de aviones alemanes en trece aeropuertos del mundo -entre ellos el de Palma de Mallorca-, si no se permitía a policías alemanes participar en las tareas de control y vigilancia de pasajeros y equipajes. Según informa nuestro corresponsal en Palma, en la tarde de ayer el delegado de la DGS en Baleares no tenía aún instrucciones oficiales sobre el tema y sólo conocía las noticias publicadas por los periódicos. Al parecer, en cada avión de la Lufthansa viajarán dos policías alemanes.