Hoy hace veinte años que se lanzó el primer satélite artificial

Hoy, 4 de octubre, hace veinte años que la Unión Soviética colocó al hombre en la era espacial. El Sputnik, primera luna artificial, subió al firmamento desde una base situada en el desierto de Kazajstán. Además de la importancia científica de esta increíble aventura, la URSS aprovechó la ocasión para iniciar una ofensiva diplomática en busca de la coexistencia pacífica, que dio como resultado años más tarde los vuelos comunes Apolo-Soyuz, en una unión pacífica de las dos potencias que compiten por el poder a nivel mundial. Sobre los resultados de las experiencias espacios Ismael López Muñoz, desde Moscú, ha preparado el siguiente informe.

Veinte años desde el lanzamiento del primer satélite artificial de la Tierra es corto plazo histórico para las investigaciones. No obstante las naves espaciales nos ofrecen ya un resumen importante sobre los datos recogidos en sus recorridos. Desde los satélites más sencillos hasta los aparatos automáticos para distintos usos, desde las naves tipo Vostok, hasta las estaciones orbitales, desde los vuelos de prueba a planetas lejanos, hasta los originales experimentos combinados en la Luna, Marte o Venus, han logrado investigaciones especiales que enriquecen la ciencia, elevan la técnica y. la industria y hacen posible que el hombre penetre en un mundo extraño para él y utilice sus específicas condiciones para satisfacer las propias necesidades.La tecnología soviética, subestimada por Occidente, hizo su presentación en sociedad en el 1957, y obligaba a Estados Unidos a iniciar una rápida carrera para igualar la supremacía espacial de la URSS. Lo que ya no será posible es alcanzar los primeros logros de los soviéticos que, ahora, al conmemorar los veinte años del inicio de la aventura espacial, recuerdan esquemáticamente:

- Lanzamiento del primer cohete espacial, seguido de otros más complejos.

- Yuri Gagarin fue el primer hombre que, en 1961, realizó un viaje de una órbita completa en el espacio.

- Fue soviético el primer satélite que llevó a bordo un animal.

- Se consiguieron las primeras fotos de la cara oculta de la Luna.

- Una mujer, Valentina Tereshkova, fue también la primera en lanzarse al espacio.

- Primer satélite tripulado por tres hombres.

- Primer paseo por el espacio, de Leonov, desde el Vosjod IL

- El Luna IX se posa suavemente en la Luna.

La lista de logros sería interminable, si bien Estados Unidos no permitirían que la URSS dominase sola el espacio, y pocos meses después del Sputnik se aprestaron a poner en órbita su prime nave espacial, en enero de 1958. Poco después, con las citas espaciles del Geminis y los vuelos no tripulados a la Luna y a otros planetas, los norteamericanos igualaron a los soviéticos. En los últimos años, la competición se ha roto. Y no se apuntan al «más difícil todavía». Los científicos han hecho recapacitar a los políticos, y de ahí surgió la posibilidad de colaborar . Leonov Ykubasov, por parte soviética, y Stafford, Brandt Ysayton, astronautas americanos, se laban esta colaboración en julio de 1975, con el vuelo común Soyuz-Apolo.

Investigación desde el cosmos

La propaganda de los viajes espaciales en la URSS se hace bajo el eslogan: « El cosmos al servicio del hombre». En efecto, los primeros experimentos de producción en el cosmos han aportado resultados esperanzadores. Precisamente ha dado origen a la nueva rama científico-técnica denominada tecnología espacial. Los especialistas determinan, según sus perspectivas, que en 1990 la producción de nuevos materiales en el cosmos puede dar una utilidad de 5.000 millones de pesetas. Por otra parte, los experimentos realizados en las estaciones orbitales para recoger información útil en Geología, Hidrología, Oceanografía y Sivicultura, están estrechamente vinculadas con la investigación de nuestro planeta, con la investigación del medio ambiente. Los hombres de ciencia han establecido que el clima de nuestro planeta, en el período que abarca desde finales del siglo pasado a la terminación de la década de los cuarenta se ha hecho más caliente y que la temperatura ledia ascendió 0,6 grados centígrados. La creciente contaminación de los mares es uno de los problemas de los últimos años. Los satélites automáticos y la observación visual de los mares desde el espacio cósmico a través de los instrumentos de medición de la luz reflejada por la superficie del agua,el agua, permite determinar exactamente los límites de las zonas marítimas limpias y contaminadas de petróleo y sus derivados.

La medicina cósmica ha enriquecido, asimismo, a la medicina clásica, aportando conocimientos sobre la fisiología del hombre sano, sobre la influencia en el mismo de los fáctores del vuelo espacial, la ingravidez y la aceleración del espacio cósmico, obligó a comprobar los parámetros fisiológicos del cosmonauta. La observación durante el vuelo ha llevado al estudio de distintos métodos e instrumentos de medición que ya se usan en la medicina convencional, como por ej e inplo, en la observación del aparato vesicular y la insuficiencia coronaria oculta.

El estudio de los recursos naturales se hace ahora de manera máscil. Por ejemplo, en una región soviética, en sesenta años de estudio, se descubrieron 102 estructuras con recursos potenciales de petróleo y gas. Sin embargo, por las fotografías hechas desde el espacio, en sólo tres meses de trabajo, se determinaron 84 nuevas áreas presumibiemente petrolíferas.A pesar de que en la actualidad, sólo la URSS y Estados Unidos realizan múltiples lanzamientos de ingenios cósmicos, son ya muchos los Estados del mundo que utilizan las ventajas de la explotación espacial, entre.ellas la telecomunicación vía satélite, la televisión espacial y la información meteorológica desde aparatos orbitales.

La particularidad fundamental del sistema de comunicación vía satélite está en que un retransmisor conico puesto en órbita a una altura de 40.000 kilómetros visualiza y envía señales a toda una tercera parte de la superficie de la Tierra. La distancia extrema entre los puntos que se comunican a través del satélite puede alcanzar los 18.000 kilómetros.