"Hay que recurrir a la energía nuclear, fuente de trabajo y producción"

EL PAIS: ¿Cuál es su impresión sobre las líneas generales del nuevo programa energético español?Guido Brunner: Existe un paralelismo entre el programa energético español y el de la Comunidad. Vivimos en circunstancias similares. Nuestro gran problema no es sólo económico, tiene también una dimensión política. Nadie puede prever cómo evolucionará la situación mundial en los próximos veinte años. Nadie puede prever si los Estados Unidos seguirán importando petróleo en el volumen que lo están haciendo; en la actualidad importan la totalidad de la producción diaria de Arabia Saudita. Esto afectó no sólo a los precios del petróleo, sino también a las posibilidades de acceso que Europa tiene con respecto al petróleo. España se encuentra exactamente en idéntica situación que la CEE, tiene que importar todo su petróleo. Se ha marcado España una meta de reducción de importaciones de petróleo para poder llegar hacia el año 1985, a una importación de sólo el 50%. Es interesante que la CEE haya definido la misma meta, con objeto de reducir al 47 % para las mismas fechas.

E. P.: ¿Cómo espera la CEE llegar a tal reducción?

G. B.: Los métodos tienen que ser múltiples y aquí también tenemos una situación similar en España y la Comunidad. Primero hay que desarrollar todas las fuentes internas de producción que existen. En España hay nuevos yacimientos de carbón, en Teruel, que ofrecen perspectivas interesantes. Al mismo tiempo, los yacimientos marítimos de petróleo, en la zona de Tarragona, también suponen un cierto alivio, cara al futuro. No obstante, esto no es suficiente. España se encuentra, como dije, en la misma situación que la Comunidad, que cuenta con carbón, pero con explotaciones caras. Nos hemos fijado como objetivo llegar a una producción carbonífera de 250 millones de toneladas anuales, para 1985. Al mismo tiempo estamos intentando utilizar en todo lo posible el petróleo encontrado en el mar del Norte. Esto es lo que estamos haciendo desde el punto de vista de la oferta, ahora bien, en nuestra situación difícil, no basta. Hay que recurrir a laenergía nuclear.

La energía nuclear es una fuente adicional de riqueza en Europa. Es una fuente de trabajo, y es, al mismo tiempo, una fuente de producción. Si queremos llegar a un crecimiento en Europa entre un 3,5 % y un 5 % anual, tendremos que emplear la energía nuclear. De lo contrario, no conseguiremos cubrir todas las necesidades.

E. P.: Antepone usted argumentos económicos, pero ¿qué opina de la oposición de parte de la opinión pública? .

G. B.: Hay críticas por parte de la opinión pública. Estas críticas están empezando a cambiar de signo. Los europeos comienzan a darse cuenta que sus puestos de trabajo dependen también de la energía nuclear. Los europeos se dan, además, cuenta que si quieren evitar la incertidumbre de una dependencia excesiva de importaciones de energía, tienen que utilizar al máximo todas las riquezas energéticas que existen dentro de la Comunidad.

La CEE quiere participar y propiciar el debate

E. P.: ¿La Comisión Europea espera hacer algo para exponer públicamente sus argumentos?G. B.: Hay un debate público en toda Europa. Nosotros queremos participar en este debate como Comunidad. Tenemos previsto para el 29 de noviembre unas discusiones públicas sobre energía nuclear. Participarán los sindicatos, las asociaciones de empresarios y asociaciones defensoras del medio ambiente. Esperamos que al término de tal debate, a celebrar en Bruselas, se llegue a ciertas conclusiones en cuanto a la seguridad de reactores, la seguridad frente a la radiación, protección del medio ambiente y economía de la energía nuclear (precios, puestos de trabajo que puede crear y todos los demás aspectos). Creo que este debate contribuirá a aclarar las cosas y podamos dar un paso adelante que contribuya a vencer la inercia que está empezando a perjudicar todo el esfuerzo nuclear en Europa. Tenemos que continuar con la construcción de centrales nucleares y ocuparnos más del problema de residuos nucleares. Me parece que estamos en el buen camino, gracias al esfuerzo considerable de todos los responsables. Pero no conseguiremos nada si no logramos convencer al público.

E. P.: ¿Le informó el ministro español de Industria sobre las reservas de parte de la opinión pública española ante el programa nuclear?

G. B.: Tal como veo la situación en España, las cosas no son distintas. Hay tres centrales nucleares funcionando. Hay una docena de centrales nucleares en preparación y en construcción. Creo que un país como España, con grandes posibilidades en yacimientos de uranio, que pueden llegar a cubrir hasta el 27 % de sus necesidades de uranio, hace bien en concentrarse sobre la energía nuclear, para poder crear la base energética que precisa para garantizar el bienestar de su pueblo. La conversación con el señor Oliart ha sido positiva en tal sentido. Seguiremos teniendo contactos. Habrá un grupo de funcionarios comunitarios que irán a Madrid para evaluar el futuro plan energético español. Partirán de la misma base: la energía nuclear, sin ser el ideal como, fuente de producción energética, no obstante ofrece muchas ventajas.

E. P.: El debate nuclear que organizarán las Comunidades, ¿será la contrapartida a las manifestaciones, casi semanales, de los movimientos «antinucleares» europeos?

G. B.: Se dará la palabra a organizaciones antinucleares, entre otras. Espero que el debate servirá para reducir el tema a sus justas proporciones. Evitará el que nos perdamos en una polémica en blanco y negro, nos concentraremos sobre aspectos técnicos detallados. Estoy seguro que aportará elementos nuevos y, por tanto, contribuirá a calmar el ambiente. Contribuirá también a hacer ver al público que el tema de la energía nuclear no es un asunto que se pueda desechar en un día o dos. Se han invertido en Europa más de 20.000 millones de dólares en el sector. Dependen de esta fuente de producción más de 400.000 puestos de trabajo. No es un tema para ser tratado a la ligera.

E. P.: ¿Por qué caminos deberá pasar el futuro nuclear europeo?

G. B.: Europa ha conseguido desarrollar tipos de reactores interesantes que se venden bien en el mercado mundial. Está haciendo un esfuerzo considerable para llegar a perfeccionar la técnica de enriquecimiento de uranio, con la inauguración próxima de dos plantas, en Holanda y Gran Bretaña, que utilizan la técnica de centrífuga. Existe la técnica francesa de la difusión gaseosa, técnica en la que España participa. Esta mos en un momento en que parece que Europa se está colocando en una posición adelantada en materia nuclear. Europa, al mismo tiempo, tiene funcionando varias instalaciones de tratamiento de uranio, en el campo de los generadores. Europa cuenta con buena posición, a pesar que no habrá generadores industriales hasta 1992 o 1995. No obstante parece que dada la utilización muy favorable del uranio, que ofrece esta técnica y dada la escasez de uranio, esta tecnología parece muy interesante. Ofrece, en contrapartida, el problema del plutonio, elemento que se puede utilizar para fabricación de armas nucleares, para el que habrá que encontrar soluciones adecuadas. El momento es crucial para Europa.