El Patrimonio Nacional renuncia a 700.000 pesetas
Cien familias madrileñas no podrán hacer camping este invierno, por la negativa del Patrimonio Nacional a permitirles el uso del que funciona en Aranjuez. El camping se abre sólo en la temporada de verano, y alivia un poco en estos meses la escasez de este tipo de centros de esparcimiento que padece Madrid.Los campistas, al ver que se cerraba la temporada, comenzaron gestiones con el administrador del camping, a quien ofrecieron hacerse cargo de una especie de alquiler durante el invierno, por un total de 700.000 pesetas que pagarían por adel adelantado.
Dado que el camping no origina beneficio alguno mientras está cerrado, se pensó que no habría ningún tipo de problemas y así lo convino con ellos Víctor Niarra, alto funcionario del Patrimonio Nacional. Después de un mes de promesas esperanzadoras, se les notificó que no podía llegarse a un acuerdo.
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