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Los jardineros, decididos a mejorar su sector

Juan de Arespacochaga prometió mantener reuniones mensuales con los representantes de Parques y Jardines, que se entrevistaron con él para exponerle los principales problemas y soluciones para el sector. Desde la puesta en marcha de una escuela de jardinería, hasta una racionalización del trabajo y una mejora salarial general, los operarios de Parques y Jardines han trazado un plan alternativo a la actual situación.

Los trabajadores de Parques y Jardines, mediante sus representantes, han elaborado un proyecto de reordenación del sector como alternativa a la situación por la que atraviesan y a la que califican de anárquica. El proyecto, que le fue presentado al alcalde de Madrid, Juan de Arespacochaga, a lo largo de una entrevista de la que ayer informo EL PAIS, alude a la situación general de Parques y Jardines, a los problemas laborales y económicos, a los temas relativos a la situación del personal y a aquellos ejes generales sobre los cuales el trabajo de estos funcionarios municipales podría rendir beneficios al conjunto de los madrileños.Con la idea básica de una racionalización del trabajo, actualmente desordenado y atomizado por procedimientos anticuados, el documento de los operarios de este sector parte de considerar insuficiente el número de áreas verdes existentes en Madrid, por lo cual pide su ampliación. Para ello, admite la necesidad de una serie de reformas que comienza con la división zonal de la geografía verde madrileña y pasa por la exigencia de que al frente de cada una de éstas figure un perito agrícola. Tras considerar que los peritos, hasta el momento, han realizado cometidos únicamente burocráticos -según el texto- se dispone que el nuevo organigrama debería contar con capataces de zona, bajo cuyo mando habrían de configurarse los grupos de trabajadores que realizarían las tareas de poda, plantación, siega, arrancado de troncos y otras, de modo que desaparecieran las denominadas brigadas volantes de población y también las de riego de arbolado. Así, se establece, los trabajadores de cada zona acometerían estás tareas y se eludiría la necesidad de que las realizaran operarios de otras áreas.

En cuanto a la vigilancia de los parques y jardines el documento se refiere a su abandono y propone la creación de un servicio de vigilancia que efectuarían personas que, por condiciones físicas determinadas, no pudieran realizar otras tareas de jardinería.

Pasa luego el documento a solicitar una escuela de jardinería que contribuya a desarrollar los conocimientos de los operarios del sector, al igual que las que ya existen en otras ciudades españolas. Esta petición, que se asienta sobre disposiciones recogidas en el reglamento de funcionarios respecto a la formación profesional y que prevé la realización de cursos, podría prestar un rendimiento muy elevado al sector y dar al traste con el actual sistema de oposición, ceñido a un examen, además de hacer permanente la instrucción sobre estos temas, capacitar a los más aplicados y dignificar profesionalmente estos cometidos.

En cuanto alude a la actual compartimentación en categorías, el documento se pronuncia por que las distancias entre las retribuciones de unas y otras sean inferiores a 2.000 pesetas entre capataces, jardineros y operarios. Pasa luego a establecer una nueva tabla de coeficientes y solicita su adecuación a las clasificaciones que entrarán en vigor a partir de enero.

Respecto a las reivindicaciones económicas, se pide una gratificación especial mensual en concepto de carestía de vida e inversamente proporcional a la categoría que se ocupa. De este modo, para el operario se solicitan 6.000 pesetas, 3.000 para el oficial y 2.000 para el capataz. Tras referirse a la reivindicación de mejoras en el sueldo base y la desaparición de las nóminas de los conceptos poco claros -casi siempre relativos a complementos que rellenan el salario, pero no se contabilizan a la hora de percibir las pensiones o jubilaciones- se pide una jornada laboral de cuarenta horas semanales distribuidas en ocho diarias durante cinco días. Además, se alude a un nuevo sistema de libranzas, al paso a la Seguridad Social de todos los miembros del sector, a un chequeo anual para cada operario a cargo del Ayuntamiento y a distintas peticiones respecto a la seguridad e higiene en el trabajo, ambas muy mermadas por el descuido municipal hacia el cuerpo de Parques y Jardines.

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