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Se reivindica libertad de sindicación entre la Policía municipal

En círculos próximos a la Policía Municipal madrileña cobra estos días nueva expectación el tema de la sindicación de los agentes, reivindicación extendida entre el Cuerpo según pudo observarse a lo largo del proceso asambleario seguido por el sector durante el pasado mes de junio. En esa etapa, caracterizada también por el proceso de elección de representantes de la Policía Municipal, se puso de relieve la singularidad de los esquemas representativos vigentes para el Cuerpo y desde distintas posiciones se argumentó la necesidad de una transformación para mejorarlos.En base a ello, se situó para las fechas inmediatamente posteriores al regreso de lal vacaciones el origen del proceso de mejora y los representantes del Cuerpo manifestaron iniciar una nueva etapa de asambleas: información y gestiones para lograr satisfacer las reiv,indicaciones de los agentes de la Policía Municipal.

En el vértice de las reivindicaciones de los agentes municipales madrileños, se encuentra el nivel de percepciones salariales. En ocasiones. seaún algunos miembros de su representación, este nivel queda situado por debajo del salario mínimo interprofesional ya que el sueldo base no alcanza tales topes. Ello determina que respecto a las jubilaciones se presente una evidente inquietud entre miembros del Cuerpo.

Otra de las peticiones más extendidas entre el sector es la que consiste en recabar de algunos responsables municipales un trato más adecuado a la profesionalidad de los acentes. En ocasiones -nos ha dicho un miembro de la coordinadora del sector- se nos ha tratado como a reclutas, lo cual «resulta de todo punto inadmisible». agrega.

Asimismo, las actuales perspectivas de los agentes de Policía Municípal. a través de los testimonios de algunos de sus representantes, se orientan hacia una plena revitalización de la imagen del Cuerpo, sobre el cual trataron de impactar durante muchos a ños la corrupción y el favoritismo vigentes en otros sectores de la vida instítucional de la ciudad. En base a este deseo también se configura la reivindicación de libertad de sindicación, accesible para otros estamentos del funcionariado municipal pero, de momento alejado de la Policía Municipal.

La principal dificultad respecto a este punto reside en que cada agente porta una pistola durante su servicio y según la normativa vigente. los institutos armados no pueden configurarse, sindicalmente, de un modo homólogo a otras entidades desarmadas. Sin embargo, añaden los representantes, la Policía Municipal no es ningún instituto armado. En caso de manifestación, como ejemplo -establece un representante- seríamos juzgados por un tribunal civil y no militar, además de que para muchos de nosotros la pistola constituye un aditamento innecesario.

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