En busca de fórmulas para conseguir la vinculación de Navarra
Cuando en el horizonte político vasco se anuncia una próxima entrevista Suárez-Leizaola para estudiar el establecimiento de una autonomía provisional para Euskadi, resulta que los partidos políticos mayoritarlos no se han puesto todavía de acuerdo entre sí acerca de la fórmula que quieren proponer al Gobierno. Por esta razón, el señor Leízaola no ha querido pronunciarse en torno a esta entrevista, porque él no pretende sacarse de la manga ninguna fórmula mágica y quiere que sean los partidos los que se la ofrezcan. Esta semana va a ser a todas luces decisiva para que los partidos vascos unifiquen sus criterios al respecto. Mañana tendrá lugar una reunión PNV-PSOE para contrastar sus respectivos proyectos. El de los socialistas es conocido por todos y va por el camino de una diputación general para las cuatro provincias vascas, basándose en los representantes parlamentarios, por ser los únicos que hoy por hoy tienen una plena legitimidad democrática.
En este sentido, el PSOE ha hecho público que la actual Diputación Foral de Navarra carece de toda autoridad para negociar con el poder central la autonomía de Navarra, debido a que sus miembros no tienen representatividad democrática y porque su actividad actual responde, a juicio de los socialistas vascos, únicamente a un oportunismo político y no al deseo de dar satisfacción a las aspiraciones del pueblo navarro, tantas veces negadas por esas mismas personas.
El plan del PNV no ha sido hecho público en detalle porque el propio partido señala que no quiere lanzarlo a la publicidad antes de contrastarlo con otros partidos, a fin de evitar posibles antagonismos. Pese a todo, sus líneas generales se refieren al restablecimiento de los fueros en las cuatro regiones vascas y al establecimiento de un organismo confederal que negocie el estatuto de autonomía.
Los dos proyectos tratan de reconocer en todo momento la peculiaridad de Navarra, a fin de no ahuyentar los escasísimos deseos que ya de por sí tiene UCD de Navarra para incorporarse a Euskadi.
Hace falta ahora que los seis parlamentarios navarros de UCD acepten también algún tipo de relación con Euskadi
