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Fuentes Quintana defiende la viabilidad del programa económico

El vicepresidente Fuentes Quintana compareció ayer ante las cámaras de RTVE, en un intento de tranquilizar a los españoles -empresarios, trabajadores y ahorradores, por este orden-, clarificando las medidas de actuación económica urgente que ha elaborado el Gabinete. En cualquier caso, esta intervención del vicepresidente económico puede también tenerse por relativamente trivial en cierta medida al no haber aportado datos sus tancialmente nuevos sobre los planes económicos del Gobierno y haberse remitido a lo ya expuesto por colegas suyos de Gabinete o adelantado por los medios de comunicación.

Mal servido por el equipo técnico -se produjeron dos ostensibles cortes- el responsable del equipo económico del Gobierno empleó casi veinticinco minutos en dar lectura a los catorce folíos de su intervención. En un lenguaje diáfano, escalonando los temas tratados, en sucesión -devaluación, efectos en las reservas, reforma fiscal, moderación de rentas salariales, defensa de la empresa, ahorro, paro...-, el titular de la vicepresidencia económica reveló su preocupación por acercar al español medio la filosofía del plan gubernamental y su aplicación a la realidad.La defensa de la figura del empresario y de la economía social de mercado,junto al esfuerzo por captar la credibilidad hacia las medidas fiscales fueron acaso los momentos más importantes de la intervención. También se refirió a la necesidad de moderar -no congelar- los salarios, explicando cómo un crecimiento desmedido de las rentas salariales se traslada inmediatamente a los precios, con importantes efectos inflacionistas.

En todo momento, destacó el talante negociador del Gabinete, como qorresponde a una sociedad que pretende consolidar la democracia. Las primeras palabras del vicepresidente segundo del Gobierno insistieron en los aspectos ya expuestos en su primera intervención -véase EL PAIS del 9 de julio-, respecto a las dificultades de la actual coyuntura y a la necesidad de aportar el esfuerzo solidario y colectivo para salir de la crisis. Posteriormente, pasó a explicar los motivos por los que el Gobierno había retrasado la exposición del trasfondo de su plan de actuación urgente: demostrar la voluntad del Gabinete al aplicar previamente las principales medidas y conceder prioridad a las instituciones -las Cortes- en el conocimiento detallado de las actuaciones programadas.

El nuevo tipo de cambio

El nuevo tipo de cambio realista de la peseta, definido el pasado 12 de julio, constituyó una de las medidas esenciales para el primer grupo de actuaciones. Desde que se adoptó, se ha invertido la tendencia del mercado sobre la peseta, pasando de una situación de oferta a la actual de demanda. El tipo de cambio ha mejorado sensiblemente desde el 12 de julio, recuperando dos puntos en el porcentaje inicial de devaluación frente a todas las monedas importantes. Igualmente, frente a la sangría de cien millones de dólares diarios en pérdida de divisas para sostener la anterior cotización, se han registrado unos ingresos en divisas en el Banco de España de 1. 172 millones de dólares, desde la aplicación del nuevo tipo cambiarlo.

La decisión del Gobierno mereció la aprobación del Fondo Monetario Internacional, cuyas autoridades recomendaron, no obstante, complementarla con medidas fiscales, monetarias y de política de rentas, en el boletín confidencial distribuido entre los directores ejecutivos del Fondo el 13 dejullo pasado.

De cualquier forma, la medida tiene un indudable componente desanimador de cara a las importaciones y, al mismo tiempo, incentivador sobre las ventas españolas al exterior. En esta línea han debido repercutirse inmediatamente los costes devaluatorios sobre los precios de determinados productos, cuyo componente es exclusivamente iniportador, como son los casos de¡ café, el aceite de soja y los productos petrolíferos.

Para que sea posible alcanzar una moderación en el crecimiento de los precios interiores, es imprescindible limitar las elevaciones salariales, dado que éstas presionan sobre los costes primero, sobre los gastos del consumo después y, finalmente, sobre los precios. Esta moderación de rentas debe iniciarse obligatoriamente por aquellos que ostenten rentas superiores y disfruten de patrimonios más elevados, reclamando su aportación a este esfuerzo colectivo por la vía de los impuestos.

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Fuentes Quintana anuncia un reparto equitativo de los sacrificios

Viene de la página primera

El señor Fuentes Quintana pasó a continuación a enjuiciar los aspectos fiscales del programa, tema éste que en el conjunto de su intervención mereció una atención especial en tiempo y en insistencia.

El deseo del Gobierno en este aspecto es -según el vicepresidente del Gobierno para Asuntos Económicos- convertir en situación normal lo que es práctica cotidiana en las sociedades democráticas que funcionan y operan bajo los principios de la economía -social de mercado en la que -apuntó- el Gobierno cree.

El proyecto de ley Fiscal trata de que los impuestos se apliquen efectivamente, rompiendo con la tradicción española de que una cosa son las normas tributarias y otra muy distinta su cumplimiento. Para Enrique Fuentes, los cuatro ases con los cuales el Gobierno quiere ganarse la credibilidad en las, normas tributarias serán cumplidas: la implantación del delito fiscal, la investigación de las cuentas corrientes bancarias, la eliminación de las sociedades interpuestas y el reforzamiento de la Administración fiscal.

«Al Gobierno no se le oculta -dijo- la dificultad y los sacrificios que esta colaboración comporta; pero está convencido de que se trata de una condición indispensable para reducir la tasa de inflación y superar nuestras dificultades actuales, al menos si se desea lograrlo sin afectar duramente a la producción y al empleo. »

Este argumento lo utilizó el señor Fuentes Quintana para soficiar una moderación -no congelación- de los incrementos salariales. «Para conseguir estos objetivos, el Gobierno intenta abrir con las centrales sindicales y los empresarios una negociación esperanzadora que, con las suficientes dosis de comprensión de los problemas de todos ( ... ) defienda el poder adquisitivo de quienes perciben los más bajos niveles de retribuciones.»

La política monetaria fue abordada seguidamente por el vicepresidente, quien dijo que se tendrá que utilizar ésta con prudencia, pero con la decisión que el caso requiere. «En consecuencia, la tasa de expansión de las magnitudes monetarias se va a desacelerar a un ritmo lento, que no provoque tensiones, y el tipo básico de redescuento del Banco de España que regula aún otros varios tipos de interés, sólo se ha elevado en un punto porcentual.»

El cuarto camino queel Gobierno se propone recorrer para sanear la economía, se refiere al establecimiento de una auténtica economía de mercado en nuestro país, subrayan do la necesictad de que el mercado y la libre iniciativa funcionen como tales, fuera de toda concepción paternalista y de cualquier tramado de intervenciones.

Empresa y productividad

En esta fase de su intervención, el señor Fuentes Quintana se refirió al papel del empresario. En este sentido, dijo que hemos vivi do unos tiempos de cambio pro fundo en los que ha tendido a extenderse una actitud hostil hacia la figura del empresario. «Nuestra sociedad debe revisar esta actitud y reconocer el papel social importante que corresponde al empresario en su ámbito propio». El señor Fuentes insistió en el te ma de la productividad al señalar que la economía española necesita superar con urgencia el grave deterioro que ésta ha sufrido y, por ello, empresarios y trabajadores deben entender esto como una tarea conjunta de la mayor importancia en estos momentos.

Este intento liberalizador de nuestra economía -dijo- es el propósito que ha guiado al Gobierno a iniciar una reforma del sistema financiero liberando los tipos de interés sobre operaciones bancarias a plazo igual o superior a un año; acercando a la realidad los tipos de interés aún controlados; programando una reducción en el tiempo de los coeficientes de inversión obligatoria de bancos y cajas de Ahorro y mejorando la flexibilidad de los actuales mecanismos de regulación monetaria.

El profesor Fuentes explicó de forma llana lo que estas reformag suponían de la siguiente forma: «España retribuye e invierte mal el ahorro que realiza. Nada debe cuidar tanto un país que desee el progreso como aquellas inversiones a las que canalizar su ahorro. Nuestro ahorro es costoso. Cuesta al consumidor el sacrificado esfuerzo de renunciar al consumo, y este esfuerzo debe retribuirse adecuadamente y, sobre todo, debe orientarse hacia aquellos sectores con mayor rendimiento y mayor eficacia. Y esto es lo que se ha hecho en España en los últimos años (...). Este es el propósito fundamental que trata de servir las recientes disposiciones que reducen a susjustos límites los circuitos privilegiados de financiación, que colocan el precio del dinero en el nivel debido para que se administre con escrupulosidad y eficacia.»

El tercer gran problema de nuestra economía analizado por el señor Fuentes se halla en las cifras de paro, cuya solución debe ir ligada a la desaceleración de la inflación y a la mejora del déficit con el exterior. En este sentido anunció la necesidad de implantar dos canales diferentes no inflacionistas: los mayores y más justos impuestos y la emisión extraordinaria de un empréstito desolidaridad nacional que permita contar con los medios precisos disminuyendo el gasto.

Terminó su intervención ante las cámaras de televisión señalando que todas estas acciones que integran el plan de urgencia han sido elaboradas bajo la presión de los hechos y bajo el condicionamiento del tiempo disponible, no agotan, sino que inician, el programa de política económica del Gobierno.

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