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Siete personas detenidas en España como autores del secuestro de Revelli-Beaumont

Siete personas, seis de ellas argentinas y una de nacionalidad italiana, han sido detenidas por la policía española, a instancias de las autoridades judiciales francesas, acusadas de ser los autores del secuestro del presidente de Fiat-Francia, Luchino Revelli, el pasado 13 de abril.

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Durante una rueda de prensa, mantenida a última hora de la tarde de ayer por el portavoz oficial de la Presidencia del Gobierno, Fernando Onega, con los medios informativos, se negó cualquier posibilidad de que el Gobierno español ponga sobre la mesa de negociación la extradición de los siete detenidos en España a cambio de la extradición a nuestro país de Miguel Angel Apalategui, Apala, sobre la que se ha de pronunciar el tribunal de Aix en Provence el próximo día 2, acusado de participar en el secuestro del industrial vasco Javier de Ybarra, cuyo cadáver fue encontrado posteriormente en el alto de Barázar.Tres de los detenidos por la policía española lo fueron en Marbella, en la provincia de Málaga. Son éstos: Horacio Francisco Rossi, de 41 años, nacido en Castelar, provincia de Buenos Aires; Víctor Oscar Castillo, nacido en septiembre de 1921 en Buenos Aires, y Vincenzo Giarratana, de 32 años, natural de Vizzini-Catania, Italia. Los otros cuatro detenidos lo fueron por inspectores afectos a la Brigada Central de Investigación, en Madrid. Sus nombres son: Luis Alberto Ramos, nacido en junio de 1941 en San Fernando, provincia de Buenos Aires; Alfredo Mario Roca, natural del mismo lugar, donde nació en diciembre de 1944; Carlos Alberto Arbelos, también nacido en San Fernando, el mes de abril de 1944, y Héctor Iriarte, también argentino, nacido el mes de diciembre de 1935.

Según la nota facilitada durante la rueda de prensa de ayer por la tarde, en la que se dio cuenta oficialmente de la detención de estas siete personas, se aseguraba que «en los registros efectuados en los domicilios que todos ellos ocupaban han sido encontrados indicios suficientes para demostrar su participación en el secuestro del señor Revelli-Beaumont, por lo que han sido puestos a disposición de las autoridades judiciales españolas que se habían hecho cargo de este asunto».Durante la rueda de prensa, Fernando Onega, como portavoz oficial de la Presidencia del Gobierno, fue repetidamente preguntado sobre la posibilidad de que ahora el Gobierno español establezca una especie de intercambio entre los detenidos en España en relación con el secuestro de Luchino Revelli y Miguel Angel Apalategui, Apala, presuntamente implicado en el secuestro que terminó con la muerte de Javier de Ybarra.A ello respondió el señor Onega que «no se negocian cambios» y que «esto no es un mercado y, por tanto, no se puede establecer un tráfico, además de que ambos temas tienen una valoración jurídica distinta».

Por lo que respecta a la posibilidad de que los detenidos fueran considerados, sobre todo a efectos de la petición de extradición, cuyos primeros trámites parece ser que ya han iniciado las autoridades francesas, como detenidos políticos, Fernando Onega negó toda posibilidad de ello, «aunque las personas detenidas pueden haber tenido una más o menos marcada ideología política». En la rueda se afirmó también que los siete detenidos por la policía española tenían antecedentes por delitos comunes. Sin embargo, se hizo referencia a que por lo menos uno de los detenidos tenía una filiación política cercana al peronismo. «Desde luego -añadió- no están muy a la izquierda.»

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